Una serie de problemas enfrentan los habitantes de la urbanización Nando Marín, al sur de Valledupar: inseguridad, elevadas tarifas de los servicios de empresas públicas, tapas de alcantarillas dañadas, malos olores de desagües, charcos, grietas en las paredes de las recién entregadas viviendas y a eso se le suma la falta de agua.
Tres días sin el vital líquido fueron suficientes para que los habitantes de 18 torres correspondientes al sector La Creciente, donde habitante 364 familias, de una urbanización de más de mil apartamentos, se tomaran las vías de hechos para reclamar por un servicio que dicen pagar por un elevado precio.
Desde tempranas horas más de 300 personas se aglomeraron en las vía que de Valledupar comunica con el municipio de Bosconia. Los manifestantes bloquearon la vía e impidieron el paso de vehículos.
A partir de las 5:00 de la mañana se aglomeraron en el sitio en cercanías a la Central de Abastos de Valledupar para solicitarles a las entidades correspondientes la pronta solución de ésta y otras problemáticas que deben afrontar a diario los residentes del conjunto de casas gratis, entregado por el Gobierno Nacional.
Leonor Cuadrado Morales, quien habita en el tercer piso de la torre L del sector La Creciente, de manera constante ha tenido que subir escaleras para poder abastecerse de agua en su vivienda, en donde habitan más de tres menores.
“Yo sufro de un brazo y aun así me toca subir los baldados de agua”, aseguró la mujer.
Levinton Salinas, líder comunitario, especificó “lo que buscamos es hacernos ver. La materia fecal está invadiendo los apartamentos, queremos que las entidades tomen control con la constructora. Vemos el problema en las turbinas desde hace un mes, pasamos los reportes a la constructora, quedaron a revisarla y nunca lo hicieron, entonces hace tres días se colapsó el sistema”.
Agregó “en acta quedó acordado que desde hoy comenzarán a trabajar en la fuga que encontraron, arreglarla y si no se restablece el servicio, revisarán la tubería”.
Emdupar y Fonvisocial
D’Angela Maestre Oñate, gerente del Fondo de Vivienda de Interés Social y Reforma Urbana de Valledupar, Fonvisocial, reconoció la falta de suministro de agua en las viviendas.
“En estos tres últimos días, la Alcaldía de Valledupar ha permanecido con ellos tratando de buscar la solución al incidente. Tuvimos unas dificultades en la manzana 6; de unos tubos que ya fueron reparados, por otro lado en la manzana 15 también se presentó una dificultad y una válvula de pie de la manzana 10 ya la encargó el constructor y llega el domingo”, afirmó Maestre Oñate.
La funcionaria especificó que se han presentado otra serie de inconvenientes con respecto al tema de presión para el suministro de agua en algunas manzanas y en la mañana de ayer una cuadrilla de la empresa Emdupar realizó la revisión para buscarle solución a la situación de falta de agua.
“Hemos venido enviándoles el Cuerpo de Bomberos para suministrarle a las tres manzanas que tienen dificultad, para que cuando se encuentre la solución definitiva, puedan restablecer sus servicios”, aseguró la gerente de Fonvisocial.
Por su parte, el gerente de Emdupar, Gustavo Morales Fuentes, afirmó que la entidad está dando la cara en el sitio afectado.
“Estamos trabajando para solucionar. Vamos a hacer una mesa de trabajo con los representantes de la alcaldía y de la construcción porque al parecer también hay mala manipulación del sistema, lo que también ha causado problemas”, dijo.
Posterior al pronunciamiento del gerente, Emdupar envió un comunicado en el que especifica “en el caso de las urbanizaciones Nando Marín y Lorenzo Morales, Emdupar lleva el suficiente caudal hasta los tanques de almacenamiento y de allí en adelante es responsabilidad de cada administración de las torres, conducir el agua hasta los núcleos familiares, a través del sistema de bombeo de presión con electricidad”.
Los otros problemas
Pero la falta del líquido vital no es la única problemática que padecen estos residentes. La elevada tarifa de varios servicios públicos es para ellos una injusticia al estar ubicados en un barrio de estrato 1.
“A mí el recibo de la luz me llegó el mes pasado por 116 mil pesos y el de ahora en 85 mil y eso que no tengo nevera y uso bombillos ahorradores”, dijo Suleima Meriño, habitante de la manzana 10 de Nando Marín.
La falta de busetas para el transporte de los menores hasta las distintas instituciones educativas es otra de las situaciones por la que atraviesa esta comunidad al sur de la ciudad.
“Aquí solo pasa una buseta y los niños se quedan sin ir a clases por que el cupo no alcanza”, expresó una de las habitantes, quien agregó “ni los taxis entran aquí por la inseguridad”.
Los habitantes afirman que con frecuencia, las personas son despojadas de sus pertenencias en la entrada de la urbanización, en donde hace algunos días un conductor de taxi sufrió heridas al oponerse a un atraco. Lugar en donde también fue víctima de hurto otro taxista que falleció al ser golpeado por los vándalos.
“Esto está muy inseguro, a mí me robaron y por aquí no se ve policía patrullando”, dijo Lidis Quintero, habitante del sector.
Las tapas de las alcantarillas significan peligro para la comunidad, que afirmó a EL PILÓN que hace unos días un hombre que se movilizaba en motocicleta por el lugar cayó con su vehículo a una de estas alcantarillas.
“En los apartamentos hay grietas, filtraciones de agua. En la torre donde vivo se está cayendo el mueble que sostiene la tubería del gas. Tengo tres meses que pasé el reporte a la constructora, que estará esperando que se caiga o se afecte un niño para que lo vengan a arreglar, y ni a mirarlo han ido y en la protesta nos dijeron es que eso le corresponde a Gases de Caribe”, mencionó Levinton Salinas.
Puntos de vista
Leonor Cuadrado Morales, habitante
“Mis hijos no han podido ir al colegio. Me ha tocado subir el agua a cada momento para cocinar, para el baño, para el aseo, para todo, hasta mis hijos me han tenido que ayudar”.
Pablo Navarro, habitante
“Tenemos problemas de salud pública, con las basuras, el agua, las tapas de las alcantarillas se viven dañando, es un peligro, hace unos días un señor se fue en una moto”.
Ailen Páez Rangel, habitante
“La constructora no soluciona nada. Ellos se tiran la pelota. Nosotros hemos pasado reportes de la situación y nada que nos solucionan. En mi torre también estamos sin agua”.
Guajire Ospino, habitante
“Las paredes se están cayendo, mi casa está con grietas en la placa, desde hace rato le informé a la constructora del daño, pero nada que me brindan solución. Esto nos va a caer encima”.
Elvia Estela Orozco, habitante
“Estamos pasando por problemas graves, los niños no han podido ir al colegio porque no nos alcanza el agua para bañarlos. Además la luz me llegó por 45 mil pesos”.
Por Merlin Duarte García/El Pilón
merlin.duarte@elpilon.com.co