Con el fin de recordar y representar la tradicional música vallenata, que se caracteriza por instrumentos representativos como caja, guacharaca y acordeón, el escultor Jorge Maestre creó el monumento Homenaje al Folclor Vallenato.
La escultura, en la que se representan a tres integrantes de un conjunto típico de música vallenata, se suma a las tantas obras creadas por este hijo natal que ha plasmado en diferentes monumentos imágenes representativas de personajes y elementos de esta tierra caribeña.
Situada en la diagonal 23 con avenida Simón Bolívar, la también llamada glorieta de ‘Los músicos’, es una imagen muy llamativa al ojo humano, que hace referencia a tres hombres sentados sobre una base redonda, espalda con espalda tocando los diferentes instrumentos musicales. Los tres personajes aparecen con pantalones remangados hasta la rodilla y sin camisas.
Otras de las particularidades de esta imagen son las flores que la adornan, que aunque, según expertos, no son representativas del departamento, forman parte del paisaje intercultural que embellece uno de las intercepciones más importantes de la ciudad.
Alberto Muñoz Peñaloza, director de la Casa de la Cultura, mencionó “fue ubicado en un lugar muy emblemático de la ciudad, se posicionó rápidamente en el imaginario popular, precisamente por el lugar; un punto de intercepción muy importante para Valledupar, donde confluyen distintos segmentos poblacionales y diferentes clases sociales”
Muñoz Peñaloza, aclaró que esta escultura en un tiempo fue denominada ‘Los Diablitos’ por sus facciones y contextura.
Así mismo manifestó, en cuanto a su ubicación, que “es una escultura que tiene mucha importancia desde el punto de vista cultural, constituye un espacio muy enriquecedor cuando se trata de mostrar los rasgos de nuestra cultura. Es una manera de representar la idiosincrasia y la parranda vallenata”.
Destacó el director de la Casa de la Cultura, que la figura hecha en fibra, es una de las que más ha resistido el paso del tiempo y en la que menos se ha trabajado en restauración, salvo porque en alguna oportunidad se hizo un trabajo de pintura que la afectó mucho. “Se utilizó una pintura que no era la adecuada, pero de todas maneras es una escultura a la que le prestamos mucha atención”dijo Muñoz Peñaloza.
Situación actual
En la ‘Ciudad de los Santos Reyes’ del ‘Valle del Cacique Upar’ esta tan representativa figura, así como las otra 11 más que adornan las vías de la ciudad, han sufrido deteriores por factores climáticos, resistencia del material en el que están hechos y por acciones del ser humano.
El monumento instalado en la llamada ‘Glorieta de la Ceiba’, es uno de los que tanto necesita de la intervención de la administración local, a través de la dirección municipal de cultura para recuperar su estado natural, su color original y conservarla.
El sitio donde se encuentra ubicada la figura es utilizado por indigentes como dormitorio y basureros por transeúntes, por lo que la glorieta en homenaje a los juglares vallenatos requiere cuanto antes que la administración municipal tome las medidas pertinentes para proteger el bien común.
Ante esto, Alberto Muñoz Peñaloza, aseguró que “a partir de febrero se someterá a revisión para buscar la manera de restaurarla y conseguir algún tipo de información de alguna persona que se acerque a conocerla”
Indicó “estamos buscando la manera de confrontar dos puntos, una de protección, a través de las autoridades de Policía y otro, de concientización con campañas de cultura ciudadana para que la gente se acostumbre a mirar con afecto y responsabilidad estas esculturas que son un bien de la comunidad”.
“En el tema de indigentes hay que cuidarlo y estaremos atentos para que sea utilizado en el tema formativo e informativo, para que se establezca una ruta de visita a estos lugares con el propósito de que se institucionalice y algunos operadores privados puedan mover los turistas allá y personal nuestro. La idea es que la gente conozca la riqueza que tenemos y puedan convertirse en multiplicadores de responsabilidad” dijo Muñoz Peñaloza.
Por Merlin Duarte García/ El Pilón