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Los grandes retos del nuevo director de Corpocesar

Si hay un departamento que tiene muchos problemas y retos en materia ambiental ese es, precisamente, el departamento del Cesar. Por su ubicación y su geografía, se trata de un ente territorial en cuya jurisdicción están distintos ecosistemas, cuencas y ríos que representan una gran responsabilidad para su manejo, tanto para el Estado, como para el sector privado y la sociedad civil, en su conjunto.
Al aspecto geográfico, hay que agregarle el tema económico, los retos de la gran minería, la agricultura y la ganadería, entre otros sectores económicos, que tienen un alto impacto en el tema ambiental en esta zona del país. Los retos son enormes…
De allí que existiera una gran expectativa por la escogencia y selección del nuevo director de Corpocesar, proceso en el cual participaron unas cincuenta personas y de las cuales fueron precalificadas las hojas de vida de veintiuna de ellas, con diversas formaciones profesionales.
La gran responsabilidad de dirigir Corpocesar recayó en el joven ingeniero industrial, Kaleb Villalobos Brochel, de 34 años, egresado de la Universidad Autónoma del Caribe, especialista en Derecho del Medio Ambiente de la Universidad Externado de Colombia y un Magister en Desarrollo Sostenible de la Universidad Javeriana.
Insistimos, no son retos de poca monta los que tendrá a su cargo Villalobos Brochel. En primer lugar, obviamente, cumplir con lo que establece la Constitución de 1991, en materia ambiental, y toda la normatividad existente sobre el tema y que regula el llamado Sistema Nacional Ambiental (SINA) y las Corporaciones Autónomas Regionales (CAR), como es el caso de Corpocesar.
Pero más allá de ese deber, es necesario adelantar un proceso de cambio y reorganización total de Corpocesar, entidad que se ha quedado rezagada en su tamaño y estructura, frente a los grandes retos que tiene en la actualidad y que le depara el futuro.
Hay que darle dientes a la entidad, recuperar su posicionamiento y liderazgo, para vigilar el medio ambiente en el departamento, un derecho del que deben gozar nuestros hijos y nietos, ordenar el uso de unas 35 cuencas, aproximadamente, que existen en nuestro territorio, entre las cuales se destacan los ríos Guatapurí, Cesar, el mismo Magdalena, caso aparte es la ciénaga de la Zapatosa; además, participar de manera activa en la vigilancia de la Sierra Nevada de Santa Marta, la Serranía de Perijá, entre otros sistemas, en coordinación con otros entes similares.
El tema de la vigilancia a la gran minería, capítulo aparte de la tarea del nuevo director de Corpocesar, requiere, – en nuestro concepto- una revisión a fondo del aspecto normativo e institucional, por cuanto esta importante labor está a cargo, teóricamente, de entidades ubicadas en Bogotá, pero que poco o nada hacen por prevenir, supervisar y evitar el daño ambiental que pueda generar la explotación minera en aumento en el país y en especial en esta región de la Costa Atlántica.
Adicionalmente, el nuevo director de Corpocesar, tendrá que vigilar, en serio, que los alcaldes del departamento cumplan con las obligaciones que tienen en materia ambiental, principalmente en el manejo de las basuras, aguas residuales, construcción en zonas de alto riesgo para el invierno, entre otros temas. En este aspecto no le deberá temblar la mano a la hora de sancionar a los mandatarios locales, en su debido momento.
En todo este diagnóstico, Corpocesar debe apoyarse y articularse con el gobierno nacional, especialmente con el Ministerio del Medio Ambiente, el DNP, la Gobernación del Cesar y la Asamblea del departamento, que ya le ha abierto las puertas al nuevo director, mencionándole algunos de sus principales retos, pero señalándole algunos de los instrumentos que tiene a la mano y advirtiéndole que estarán atentos al control político previsto para la entidad.
Esperamos que la gestión de Villalobos Brochel esté a la altura de las circunstancias, ojalá se apoye en veedurías de la sociedad civil y en entes como los colegios y las universidades, para fortalecer una cultura ambiental en nuestro territorio. Como medio de comunicación estaremos atentos al desarrollo de la misma y ojalá podamos contar con su colaboración para poder informar con veracidad sobre los procesos que debe adelantar la entidad y su impacto en toda su jurisdicción.

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