En campaña política toca creer en todo. Sobre todo si eres candidato a la Alcaldía de Valledupar. Fue el caso de Ernesto Orozco. A Don Pilo le contaron que la primera reacción del candidato, cuando se enteró de que le correspondía el número 7 en el tarjetón, fue acudir al agüero de que el 7 es el número de la victoria.
En el tarot el número 7 simboliza el logro de la victoria a través del esfuerzo, el triunfo y la superación de los obstáculos. Y en eso cree Ernesto. Parece que este año no puso su fe únicamente en Ape Cuello. ¿Qué le traerán las cartas?
El hombre más buscado del Valle
Aunque no aparece en un cartel, en el mundo político de Valledupar el hombre más buscado es Miguel Morales. Y no precisamente para que cante. Desde que se inscribió como candidato a la Alcaldía de Valledupar por cuarta vez, a Morales no lo han visto en los barrios de Valledupar haciendo campaña.
Parece que, igual que las otras candidaturas, ‘Migue’ está más pendiente de su carrera artística que de buscar los votos.
SALUDOS SIN HECHOS
¡Las vainas de la política! A Don Pilo le llegaron con el cuento que el concejal de Valledupar, José Lalo Gnecco, quiere repetir su curul, pero como no tiene mucho que mostrar de su paso por el Concejo, anda haciendo campaña con los saludos de su amigo del alma Silvestre Dangond.
“El hijo de LG (Lucas Gnecco)”, como le decía Silvestre, le prometió 7.000 votos a Vargas Lleras para fortalecer la lista en Valledupar. Y como no hizo casi nada en el Concejo, ni la voz le conocían, le tocó buscar en el archivo.