El Cuarto Congreso de Lengua y Literatura, desarrollado el pasado fin de semana en Valledupar, con el lema ‘Tejiendo redes alrededor de las palabras’, se convirtió en un espacio de interlocución generado en el contexto académico, como una necesidad de responder a las nuevas exigencias que tiene la sociedad sobre la educación.
Según sus organizadores, este evento, en el que participaron conferencistas como Fabio Enrique Barragán y Gonzalo España, ambos escritores colombianos con múltiples galardones y publicaciones, tiene como objetivo principal el intercambio de conocimientos y experiencias sobre los procesos que se generan alrededor de la lengua, la literatura, la lectura y la escritura en los niveles educativos, con el fin de hacer un aporte al mejoramiento en la calidad de la educación en el contexto regional y nacional.
La coordinadora de este congreso en Valledupar, Ledys Elvira Ramos Erazo habló no solo de este encuentro, sino de la realidad de la literatura entre los jóvenes de la capital del Cesar.
EL PILON: ¿Qué se busca con este Cuarto Congreso de Lengua y Literatura?
Ledys Ramos: El objetivo de este encuentro, es abrir espacios de interlocución en torno a los procesos de lectura y escritura a nivel local y regional.
Es un evento en el que se benefician no solo los estudiantes del Colegio Santa Fe, sino los estudiantes de pregrado en licenciatura de la Universidad Popular del Cesar, UPC, y para los docentes de lengua castellana.
Es por eso que con este congreso se busca, de igual forma, dar continuidad a un espacio institucional propicio para la reflexión, el diálogo y el encuentro de círculos interesados en la construcción de redes alrededor de la temática de la lengua y la literatura, para la generación y el intercambio de experiencias que contribuyan al mejoramiento de la educación colombiana.
EP: Como miembro activa de la organización de este congreso, y como docente, ¿cómo ve el desarrollo de la lengua y la literatura en Valledupar?
LR: Es un tema de mucha trascendencia en Valledupar y en la región, hay que abrir estos espacios de interlocución para establecer redes a nivel nacional.
Esos espacios son provechosos para todos y de ellos no solo se benefician los estudiantes, sino la comunidad en general. Además que es una forma infalible de abrir o encontrar en los más jóvenes la forma de que recuperen ese amor por la lectura y la escritura.
EP: Por su tarea como educadora, tiene roce constante con los alumnos. ¿Les gusta leer a los jóvenes de hoy?
LR: Sí. Aunque no en todos los casos, pero es muy curioso. Se dice que los muchachos de ahora no leen y es cuando más le dedican tiempo a esta actividad. Los muchachos están leyendo más que nunca.
EP: Como docente y desde su experiencia, ¿Cómo se fomenta la literatura y la lectura?
LR: Con espacios, que el estudiante tenga trato constante con escritores de la región y de nivel nacional; además hay espacios, como ‘Aventura lectora’, donde los estudiantes se leen hasta siete libros al año.
Incluso Colombia es uno de los países donde los jóvenes más leen en Latinoamérica y eso es producto de un trabajo realizado por los jóvenes.
Además que se está haciendo lo necesario para que las cosas continúen así e incluso mejoren y todo desde el mismo fomento del trabajo de los jóvenes.
EP: ¿A qué se refiere con ese fomento del trabajo hecho por los jóvenes?
LR: En el caso de mis alumnos, por ejemplo, se da el caso de los semilleros. Ellos presentaron dos proyectos en curso. Uno evalúa el comportamiento lector de los estudiantes para ver cómo van esos índices a nivel regional, local y en América Latina.
El segundo, analiza cómo la tecnología está afectando el proceso de lectura, para bien o para mal, cómo aporta a la lectura y cómo dificulta que los jóvenes les dediquen tiempo a esta práctica.
De esta forma se está trabajando no solo desde las matemáticas o las ciencias naturales; los procesos de lectura y escritura también son parte de estos procesos de semilleros.
EP: ¿Cuál cree que sea el principal enemigo que tiene la literatura para ingresar al mundo de los jóvenes de hoy?
LR: Un arma de doble filo es la tecnología, pero nosotros estamos aprovechando esos espacios o recursos tecnológicos para estimular la lectura en los estudiantes.
EP: ¿Qué diferencia hay entre la relación alumno texto de antes y la de ahora?
LR: Hay más espacios. Los jóvenes de ahora tienen mucho más espacio para leer y más facilidades de acceso a la lectura y a la escritura, la clave es enseñar a usar esas herramientas y aprovechar esos espacios.
EP: ¿Qué les recomienda a los padres de familia que quieren fomentar la lectura en sus hijos?
LR: Dar ejemplo. Es importante para el desarrollo académico del joven la lectura.
Hay que ver un dato importante: no podemos demostrarlo, pero la lectura está relacionada con el buen rendimiento académico, tan es así que los alumnos que obtienen los mejores resultados son los que más leen.
Esto es un trabajo en equipo, no es solo cuestión de los profesores, en la casa tienen que inculcarle el amor por la lectura y eso se da con ejemplo.
Por Pepe Morón Reales
Pepe.moron@elpilon.com.co