Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
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Alrededor de 35 latas de café, 30 latas de cacao, 5.000 a 10.000 naranjas, zapotes, unos 15.000 guineos, en tan solo tres días de invierno que hubo en las veredas de la zona de Sabana Crespo, en el municipio de Valledupar, fueron las pérdidas que se contabilizaron el año pasado y que permiten hacer una radiografía sobre las dificultades que deben enfrentar los campesinos en el departamento del Cesar para comercializar sus productos dadas las condiciones en que se encuentran las vías que comunican a los productores con las zonas urbanas.
En ese entonces, los campesinos, como relató Evelio López, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda La Estrella, tuvieron que salir a pico y pala a destapar las vías. “Así pasamos tres días para tratar de destapar las vías y lograr rescatar un poco, pero el resto se perdió porque el café ya coge mal olor, lo compran a menor precio, el guineo llega podrido y no lo quieren y así pasa con el resto”. dijo.
Ahora mismo, de hecho, de cara a la temporada invernal que se avecina y con apoyo del Comité de Cafeteros que donó los materiales necesarios, los campesinos de este lugar ya han hecho tres gaviones que comprenden 15 metros de longitud con los que esperan enfrentar las lluvias que se pronostican y que cuando ocurren los afectan considerablemente puesto que provocan el taponamiento de las vías, las cuales están en varios tramos en muy malas condiciones.
Esto tiene unos efectos notorios a la hora de trasladar los productos desde las fincas donde se cosechan hasta los cascos urbanos en los cuales se comercializan. Para esta finalidad, los campesinos tienen que contratar carros que viajan algunos días a la semana pero que por las mismas condiciones de los terrenos no llegan con los productos en el mejor estado puesto que enfrentan las diferentes dificultades que presentan las vías terciarias, además que representan una inversión mayor en todo el proceso de comercialización.
Pero esta situación no solo representa una afectación para el tema comercial, otros aspectos como el acceso a la educación y la salud también terminan sintiendo los daños colaterales de la falta de adecuación de estos caminos.
“Es muy dificultoso porque tenemos una gran cantidad de problemas por el tema de vías terciarias. La visión que uno ve, la problemática de vías está como que remota y eso influye para la cuestión de la educación que es bastante precaria en cuestión de transporte para los alumnos y en cantidad de cosas”, sostuvo López.
La situación ha sido tal que los campesinos siguen sintiendo que el campo se encuentra en abandono porque consideran que hace falta una política pública que los motive también a promover sus cultivos y contar con los aspectos necesarios para generar una competitividad que termine siendo un reflejo de las capacidades que posee el Cesar.
Sobre la situación de esta red que comunican las cabeceras municipales con sus veredas y a estas últimas entre sí, el secretario de Infraestructura del departamento, Federico Martínez, reconoció que todavía hay mucho por hacer en este sentido, que tiene dificultades acentuadas sobre todo por la dificultad del relieve que existe, en referencia a las partes altas de la serranía de Perijá y la Sierra Nevada de Santa Marta. Sumando esto también a que, como sostuvo el funcionario, el sector rural es muy disperso lo cual implica un recurso bastante alto para llegar hasta las zonas y trabajar.
Entre tanto, explicó que en el Cesar existen cerca de 7.300 vías entre secundarias y terciarias, de las cuales el ente departamental mantiene 300 kilómetros que son principalmente las vías secundarias, mientras que el Invías atiende cerca de 1.400 kilómetros que terciarias y los municipios se encargan del resto.
Al tiempo señaló que en este cuatrienio de la administración Ovalle Angarita se han pavimentado casi 200 kilómetros que han tenido una inversión superior a los 200 mil millones de pesos y que con el Banco de Maquinaria han ejecutado tanto pavimentaciones como mantenimientos a cerca de 850 kilómetros de vías terciarias.
“El departamento del Cesar es un departamento agropecuario aunque el PIB lo mueve el sector minero, pero el sector agropecuario es el que más empleo genera y las vías que estamos atendiendo son vías que conectan el campo con las cabeceras municipales”, aseguró Martínez.
Justamente con el Banco de Maquinaria, con el que tienen cerca de 54 máquinas en todo el departamento que abaratan, según Martínez, los costos de pavimentación o de mantenimiento de una vía terciaria, están ayudando a los municipios a dar respuesta a este requerimiento dado que, en sus palabras, los municipios tienen recursos muy limitados.
Sin embargo, con relación al Banco de Maquinaria, el diputado del departamento, Alfredo Pinto, indicó que se hace necesaria la actualización y compra de unos nuevos equipos porque los que tienen actualmente no se encuentran en el mejor estado porque no le hicieron oportunamente los debidos mantenimientos.
“Hoy día están en una situación deplorable y no podemos aspirar a ser competitivos, a ser productivos si no tenemos una red de vías terciarias en unas condiciones óptimas que permitan que nuestros campesinos y agricultores puedan sacar sus cosechas a los centros de consumo”, manifestó el corporado.
Aunque reconoció el esfuerzo que se hace a través de dicho proyecto, reiteró que todavía no es suficiente puesto que la mayoría de los municipios tienen su red terciaria en muy malas condiciones y esta maquinaria no alcanza para atender todas las necesidades que tienen las diferentes regiones del Cesar en el tema de vías terciarias.
Del mismo modo, se refirió a que el gobierno departamental hablaba de unos kilómetros en reparación de vías terciarias en el departamento del Cesar y que justamente en el Plan de Desarrollo establecieron unas metas para el mejoramiento de estas en el departamento, que, sin embargo, todavía no han recibido suficiente apoyo para el mejoramiento de las mismas. A pesar de esto expresó que con el Plan Vial fase dos han mejorado muchas vías, pero que en la parte de cordilleras en la zona alta donde se han hecho unos esfuerzos todavía no ha sido suficiente.
“Hay que pensar en placa huella porque ahora que llega la temporada invernal le metes una máquina se pierde el trabajo de todo el día, un simple aguacero se pierde todo el trabajo y no se ve el mejoramiento de la vía. Hay que pensar en trabajar es con placa huella definitivamente”, sugirió el diputado.
Para Nancio Galván, presidente de la Sociedad de Ingenieros del Cesar, una de las cosas que ha querido el Gobierno Nacional es empezar por hacer una caracterización de las vías terciarias para identificar precisamente qué vías requieren adecuación y el estado en el que están, pero que aún persiste un retraso considerable en este sentido porque no se ha podido hacer la caracterización en el departamento.
Hablando de un aspecto más general sobre la situación de infraestructura del Cesar, declaró que el departamento se vio afectado por los procesos nacionales como la Ruta del Sol, el tema de Odebrecht, en esta vía tan importante.
“Decía el mismo gobernador que pareciera que tuviéramos mala leche con esto, desafortunadamente es así. Cayó Ruta del Sol II, la Ruta del Sol III estuvo a punto también de declararle la caducidad del contrato. La otra concesión que era Cesar – La Guajira, finalmente no llegó al cierre financiero y tuvieron que desistir también de ese proceso, entonces efectivamente se vio muy afectada la infraestructura del departamento a nivel de grandes proyectos que pasan por aquí”, dijo el ingeniero.
A nivel de vías secundarias y terciarias, mencionó que se han ejecutado algunas obras de pavimentación, pero puntualizó en que existe una gran problemática con relación a la modalidad de contratistas escogidos a dedo.
Los mismos, explicó, son proyectos que no se socializan para efectos de escoger cuáles son las rutas, vías y los proyectos prioritarios para realizar sino que la prioridad la establecen los intereses particulares de quienes están manejando la contratación del departamento.
RED DEL MUNICIPIO
De acuerdo con la información suministrada por la Secretaría de Obras Públicas del municipio de Valledupar, se han hecho algunas intervenciones que apuntan a fortalecer esta red terciaria en la zona rural de la capital del Cesar.
Para este fin se ejecutó una obra para el mejoramiento de la vía que conduce de Valledupar a Sabana Crespo con un valor de $1.995.550.806. Así también se hizo un proyecto que comprendió la restauración de un puente entre Guatapurí y Chemesquemena así como reparcheo en Las Raíces.
Sumado a esto también fue ejecutada la construcción de placa huella en varias zonas del municipio como La Mesa, corregimiento de Azúcar Buena; sectores de Cuba Putumayo y Los Cominos de Tamacal, y hasta las poblaciones de Villa Germania, Buenos Aires y Aguas Blancas, cuyo proyecto tuvo una inversión de $2.333.371.313 que incluyó también otros componentes como alcantarilla y batea para la evacuación de aguas lluvias que en invierno deterioran las vías.
Otra obra fue la construcción de las estructuras de soporte y construcción para dos puentes en la vía que comunica al corregimiento del Alto de la Vuelta con la ciudad de Valledupar por valor de $1.394.933.56. Además se ha realizado el mejoramiento y adecuación de la estructura de contención y del puente sobre el río Badillo, en La Mina, $366.086.848,00 que es el puente y mirador de dicho corregimiento.
Por último se referenció la construcción de pavimento en concreto hidráulico, en corregimientos del municipio por el monto de $ 1.497.982.658, con el que se benefician corregimientos como Los Venados, Aguas Blancas, Badillo, Mariangola, entre otros.
A esto también se suman unos mantenimientos con maquinaria del Batallón de Ingenieros que se hicieron en la vía a Villa Germania, donde el municipio aportó el combustible y el mantenimiento del puente La Vega, donde hubo una menor inversión pero que ha sido incluido igualmente se en las adecuaciones de vías terciarias.
Mientras tanto, campesinos como Evelio López siguen a la espera de que se avance mucho más en este sentido puesto que todavía requieren más inversión y atención para los tramos críticos de las vías que les permitan apuntar verdaderamente al impulso del agro en la región y la consolidación final del Cesar como una despensa agrícola, que vaya más allá del discurso.
Una de sus esperanzas, aunque ahora ven con recelo, son los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial, PDET, que se deben empezar ejecutar tras la aprobación del Plan de Desarrollo y en el que se debería comprender este componente.
“Vemos eso atrasado, aguantado, no vemos unas soluciones prontas y así pasa el tiempo y las dificultades de los campesinos en todas las veredas se hace difícil”, recordó López.
Precisamente por medio de la Agencia de Renovación del Territorio se han hecho algunas obras en las vías que fueron priorizadas por las comunidades que están dentro de los ocho municipios que se incluyen del Cesar en el PDET Sierra Nevada – Serranía del Perijá – Zona Bananera.