Muchos colombianos están molestos con el presidente Iván Duque, a raíz de las impericias que está cometiendo con sus actuaciones frente a la sociedad del país.
Lo que está pasando en su gobierno señala un horizonte de impurezas que dan al traste con la dignidad de un jefe de Estado, quien ya se atreve a salir disimuladamente a condecorar a sus amigos mientras los niños wayú de La Guajira mueren de desnutrición y mientras se roban los dineros del Plan de Alimentación Escolar (PAE), como sigue ocurriendo en todo el país.
Hay un caso muy puntual ocurrido recientemente en Santa Marta, Magdalena, en donde Duque estuvo el pasado fin de semana y en un hecho reprochable, el presidente desconoció al gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, y a la alcaldesa Virna Johnson, como primeras autoridades del departamento y el municipio.
Periódicos como La Libertad y El Universal y medios virtuales registraron en sus páginas el hecho que fue calificado como bochornoso.
La Libertad título: ‘Duque llegó a escondidas a Santa Marta y sin avisar a los mandatarios locales’. Otro titular fue ‘Critican al presidente Duque por participar en evento privado de condecoración en Santa Marta’.
De acuerdo a los hechos, el presidente llegó a Santa Marta –a escondidas- y en la hacienda El Mayor de propiedad de la familia Granados condecoró al empresario Sergio Díaz Granados, con la Gran Cruz de Boyacá.
Al evento asistieron otros políticos y copartidarios del presidente, pero no estuvieron –porque no invitaron- el gobernador del Magdalena ni la alcaldesa de Santa Marta, quienes militan en un partido político diferente al de Duque (Centro Democrático).
“No hay razón para que un jefe de Estado deambule a escondidas a condecorar en sus casas a sus copartidarios ni mucho menos gastar de los recursos del Estado una millonada para imponer una medalla”, dicen los ciudadanos.
Es impertinente la acción de Duque e irrespeta a los colombianos, porque él es el presidente de los colombianos y el trato para todos debe ser igual, sin distinguidos.
Lo de Santa Marta no se puede repetir, como tampoco puede ocurrir que el gobernador Luis Alberto Monsalvo vaya a Codazzi u otro pueblo del Cesar y desconozca al alcalde, eso sería otra canallada.
El país requiere de un líder que se identifique con todos y con todas las clases sociales. En donde el tema de la estratificación no sea óbice para imponer una medalla, cuando hay cientos de colombianos hambrientos y enfermos que necesitan alimentos y medicinas, Duque malgasta millones de pesos en sus vuelos aéreos a imponer condecoraciones públicas en lugares privados.
Carlos Caicedo calificó el hecho como “patético” y acusó a Duque de darle la espalda al Magdalena en plena pandemia. Incluso, la inesperada y silenciosa llegada de Duque a la capital del Magdalena revive las heridas del dirigente político Carlos Caicedo quien siempre ha dicho que ha sido un perseguido del CD. Alegó que dicho partido busca más protagonismo político que trabajar por el bienestar de la gente.
Se recuerda que Santa Marta cumplió -la semana pasada- 496 años, pero el Gobierno central desconoció dicha fecha. “No tienen un peso para invertir aquí”, dijo Caicedo.
Durante las críticas al jefe de Estado, salió a relucir la desgracia que ocurre en La Guajira en donde han saqueado los dineros del Plan de Alimentación Escolar (PAE).Incluso se advierte que el operador destituyó a la docente wayú, Rosa Redondo, porque se atrevió a denunciar las irregularidades del PAE en su territorio. Mucha desgracia. (Hasta la próxima semana.
@tiochiro