Por medio de los Grupos Significativos de Ciudadanos algunos candidatos aprovechan para iniciar campaña desde un año anterior a las elecciones, recogiendo firmas para su candidatura.
A diez meses de las elecciones, en el mes de diciembre del 2018 ya estaban instaladas vallas publicitarias en puntos estratégicos de Valledupar, así como en Becerril, La Jagua de Ibirico y otros municipios del Cesar.
Vallas y panfletos sin nombres especificos, como una campaña de expectativa en la que muchos ya saben cuál es el candidato, contrariando las leyes que solo permiten la publicidad tres meses antes de las elecciones.
Primero la Ley de los partidos políticos (Ley 130 de 1994) y más reciente la Ley 1475 de 2011. Ambas, en diferentes artículos, son claras: “Entiéndase por propaganda electoral la que realicen los partidos, los movimientos políticos y los candidatos a cargos de elección popular y las personas que los apoyen, con fin de obtener apoyo electoral. Esta clase de propaganda electoral únicamente podrá realizarse durante los tres (3) meses anteriores a la fecha de las elecciones”.
Así lo determina el artículo 24 de la Ley 130 de 1994, que en épocas de campaña es violentado, por algunos de forma directa otros más sutil.
Es importante señalar que la mayoría de esos espacios publicitarios pertenecen a Grupos Significativos de Ciudadanos que están en auge y que promueven candidatos a todos los cargos para las próximas elecciones regionales.
¿Por qué tanto candidato por firmas? A los grupos significativos se les permite hacer campañas para recolectar firma antes de los tres meses estipulados por las leyes. De allí que algunos prefieren lanzarse por firmas para hacer publicidad con el logo del grupo diez meses o incluso un año antes de las elecciones, que en este caso serán el 27 de octubre.
Sin embargo, la mayor ventaja es que el dinero que invierten recogiendo firmas, que a la vez es una forma clara de hacer campañas, no deben registrarlos en la rendición de cuentas que por ley presentan los candidatos una vez finalicen las campañas.
El Cesar es el sexto departamento con más Grupos Significativos de Ciudadanos. A falta de siete meses para las elecciones, ese ha escrito 18 grupos para alcaldías y 3 para la Gobernación del departamento.
En un comienzo los grupos de ciudadanos nacieron como una alternativa a los partidos tradicionales que en algunas partes del país no cuentan con gran aceptación. Pero ahora se utiliza la fórmula de contar con varios partidos políticos y lanzarse por Grupos significativos para hacer campaña un año antes sin problemas y sin necesidad de registrar de dónde viene ese dinero.
En Valledupar hasta el momento los grupos más significativos son ‘Por ti Valledupar’, como candidatos Ernesto Orozco, y ‘Movimiento ciudadano por Valledupar ‘, como candidato el Mello Castro, ambos a la Alcaldía de Valledupar.
De ambos grupos ya hay pancartas, afiches en carros y buses, en busca de firmas. Por la Gobernación, hasta el momento el grupo significativo que más ha sonado es de Kaleb Villalobos, ‘Por un Kambio Verdadero para el Cesar’.
Según el asesor jurídico de la Misión Observación Electoral, lo que se le pide al Consejo Nacional Electoral es que obligue a los inscritos por grupos de ciudadanos a presentar registros de sus gastos durante la recolección de firmas.
“Cuando alguien está recogiendo firma. Ahí se puede, porque se está convocando a la gente para que firmen. Ahora, esa información no la reportan y lo que está diciendo desde la Misión de Observación Electoral al Consejo Nacional electoral es que obliguen a estos grupos a que reporten estos dineros que están invirtiendo. Porque el dinero que se utilice, que digan de donde viene ese dinero”, explicó Marlon Pavón.
Por ejemplo, en las elecciones regionales del 2015 PARA LAS ELECCION ES 2015, se registraron alrededor de 810 grupos significativos; de esos menos de la mitad (307) presentaron las firmas. Se desconoce si los restantes 503 que no presentaron las firmas y pudieron hacer campaña para recogerlas mostrando a un candidato, terminaron aliados o inscritos por partidos. Pero de esos 307 grupos que presentaron, solo a 194 se les aceptaron la firma. A los que le rechazaron podrían seguir su candidatura por partidos, y los que le aceptaron apoyados en sus grupos significativos
Otro tema es con los candidatos que no van por firma, sino por partidos políticos e inician con campañas de expectativas antes de los tres meses, lo cual es ilegal. Nada de lo que gastan con anterioridad lo registran en el informe final de gastos. “Es que no lo reportan porque es ilegal y no se van a tirar un plomo al pie. No es tanto que se reporta, sino los gastos que se genera. Los dineros que están utilizando ahora, si se suman a los tres meses podrían superar los topes electorales”, agregó Marlon Pavón.
Por: DEIVIS CARO DAZA / EL PILÓN
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