“Desde muy niño me he podido convencer que la Virgen del Carmen es mi santa preferida”
Corresponde el aparte transcrito a la canción Titulada “La Virgen del Carmen” de la autoría de Emilianito Zuleta Díaz, Rey de Reyes de la Canción Inédita, Rey Semiprofesional en el concurso de Acordeones del Festival Vallenato y Rey de la nota picada en nuestra más bella música colombiana, obra musical constituida por la sabiduría popular como himno de las fiestas del dieciséis de julio.
Ese disco además de ser uno de los merengues mejor ejecutados por el hijo del viejo Emiliano y Carmen Díaz en compañía de su hermano, fue incluido por ellos en la producción discográfica titulada “Tierra de cantores” para la disquera CBS hoy SONY MUSIC en el año 1978 que tuvo la particularidad que todos los temas fueron éxitos, en aquellos tiempos los programadores de radio no obligaban a sus oyentes como ahora a escuchar un solo disco metiéndoselos por los ojos, por los oídos y hasta en la sopa, sin derecho a enterarse que otras canciones han condenado al anonimato sistemático y calculado.
También tiene ese LP la especial connotación, que uno de los coristas que intervino en la grabación fue el mismísimo Joe Arroyo, quien todavía no había iniciado su periplo musical con “La verdad” y permanecía aun como integrante de la orquesta de Fruko; por cierto he sabido que a Poncho no le sonaba que ese muchacho cantante de salsa hiciera los coros porque no entendía como iba a ser eso si el vallenato no era su fuerte, el exigía que viniera Juan Piña para eso, lo que finalmente no fue posible, y por eso fue Piña quien lo recomendó, así acepto Zuleta que este lo hiciera pero con cierta incredulidad, pero después de escuchar lo que se grabó, pudo darse cuenta que estaba equivocado porque aquello fue fenomenal, basta con escuchar Rio Badillo, La Virgen del Carmen y El Gallo fino para saber que el Centurión de la noche allí dio sopa y seco y si alguien pedía más que le picaran caña..
No fue aquella la única oportunidad que tuvo el Joe de estar cerca de los Zuleta, porque en uno de sus Discos, incluyo el tema vallenato “Soy el folclor” del Viejo Cujia, acompañado en el Acordeón por Emilianito, es un merengue espectacular, en el cual se nota que sus dos intervinientes lo grabaron contentos y lo disfrutaron a plenitud mostrándose cada uno de ellos en toda su dimensión.
Presumo que cuando “El gago de oro” hizo la emblemática canción a esa virgencita respetada y adorada por los ricos y los pobres en casi todo el mundo nunca tuvo propósito distinto de brindarle a su santa patrona un homenaje desinteresado y folclórico como devoto agradecido, sin pensar jamás que se convertiría en símbolo de una fiesta justamente celebrada por todos los conductores y también por los pescadores de Colombia; definitivamente, el mayor de los Zuleta Díaz, puede guindar una hamaca para mecerse y vivir de su fama, su obra musical como compositor y como ejecutor insigne del arrugado instrumento ya es inmortal y es su mejor presentación.
No estará tampoco ausente de la mente de la gente Diomedes Díaz, quien era fiel devoto de la Virgen y siempre la mencionaba, prueba de ello, son los discos Mi muchacho, Volver a vivir, 26 de mayo, El alma de un Acordeón y Un canto celestial entre otros; sin duda debe estar ya con la virgen preparando el festejo, allá donde todo es maravilloso, pera aquí, estamos extrañando desde ya a ese juntero de cepa que en vida hizo lo que quiso y se murió como le dio la gana, que puso la muerte a esperar
“El dieciséis de julio es la fiesta de la Virgen del Carmen ese fue el día que le escuche al padre que Dios a todos nos tiene en cuenta” (Diomedes)
Luis Eduardo Acosta