Algo sobre
Por: José Romero Churio
La mejor manera de tener un país más justo es con educación continua, cuyas prioridades sean la enseñanza de los principios y valores éticos, el respeto de los derechos humanos, el logro de prosperidad a través de trabajo honesto y el cumplimiento ejemplar de las leyes institucionalmente establecidas.
Esta es, en síntesis, la propuesta del profesor Antanas Mockus, que más de tres y medio millones de colombianos acogieron el pasado 20 de junio. Tan significativa cantidad lo anima a proseguir en la búsqueda de la presidencia del país, o conseguirla con otro líder del Partido Verde que con ideales y buenos propósitos en tan corto tiempo se ha convertido en la segunda fuerza política de Colombia, pues así lo manifiesta en el discurso de reconocimiento del triunfo de Juan Manuel Santos.
En realidad, la amplia victoria de JM Santos se debió más que todo al abierto respaldo de la maquinaria gubernamental y a la resonancia de las diatribas contra el profesor Mockus, proveniente de muchas personalidades componentes del oficialismo, cuyos conserjes difunden fielmente en defensa de sus intereses económicos, utilizando sus poderosos medios de comunicación masiva; verbigracia: RCN y otros que también obtienen iguales o mayores beneficios.
Ante el acompañamiento de tantos personajes politiqueros que rodean regocijados a JM Santos, sería ingenuo creer en su promesero discurso de celebración. Es evidente que su convocatoria de unidad terminará circunscrito al burocratismo clientelista, similar al Frente Nacional acordado entre Laureano Gómez y Alberto Lleras Camargo, durante el cual se repartieron milimétricamente los puestos públicos sin mérito alguno.
En consecuencia, por doquier seguirá galopante el despilfarro y apropiación del erario, que si actualmente con un número menor de politicastros asediándolo asciende a cuatro billones de pesos, no cabe duda, que en el próximo cuatrienio de gobierno la avalancha de corruptos aumentará considerablemente dicha suma.
Tal situación se reflejará en un mayor déficit fiscal, pero como siempre la más perjudicada es la población de la clase media sobre la cual recae el mayor esfuerzo para salir adelante. Entonces, en el futuro, por la escasez de empleo padeceremos mucho trabajo, y lo más grave, por lo sucedido en el pasado debate electoral, corremos el riesgo de que el mandato de JM Santos se prolongue otro periodo; es decir, hasta el año 2018. Tiempo en el que trabajaremos y trabajaremos por menos salario ya que los tentáculos de la unidad nacional también amordazarán a los grandes tribunales de la justicia.
La posición del partido verde está acorde con la conciencia cívica y el espíritu decente del profesor Mockus que como buen filosofo es respetuoso con sus semejantes. Por tanto, actuará como veedor del gobierno de JM Santos, censurando lo malo y elogiando lo bueno. Para mí el fiel de la balanza comenzó en lugar de la desconfianza y por tal el contenido de esta columna.
Para bien de todos los colombianos ojalá me haya equivocado y en caso de que así fuere gustosamente presentaría mis disculpas, pero, de veras, dudo que se desligue de la amalgama que se fundió para su elección.