X

La Unidad Nacional, una política civilizada

POR: GUSTAVO COTES MEDINA

Las entrevistas del presidente Santos en el continente europeo con el primer ministro británico David Cameron, el presidente del gobierno español José Luís Rodríguez Zapatero y el presidente de Francia Nicolás Sarkozy, constituyen un mensaje claro de apertura del nuevo gobierno hacia el viejo continente, sobre todo en este momento en que una de sus prioridades será la ratificación del Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea.
Santos también estuvo reunido con la canciller alemán Ángela Merkel, el Rey de España Juan Carlos de Borbón, los ex primeros ministros Tony Blair y Margaret Thatcher y con los ex presidentes José María Aznar y Felipe González. Se espera de España un papel fundamental en el avance de este tratado.

La segunda parte de la gira está programada por América Latina para dialogar con los presidentes de México, Panamá, República Dominicana, Argentina, Chile y Perú. Además, se reunió  con directivos del BID para examinar fórmulas de apoyo a la zona fronteriza con Venezuela. Después de su posesión, Santos viajará a Washington a reunirse con Hillary Clinton, Secretaria de Estado de Estados Unidos.

A la visión cosmopolita del nuevo presidente y al deseo de insertar más a Colombia en el plano internacional, se le suman los compromisos  que logró con los principales líderes de Europa en asuntos como la biodiversidad, energías limpias, derechos humanos, desarrollo energético, tecnología, cambio climático y desarrollo agrícola, una de las cinco locomotoras del nuevo gobierno.

Santos entró pisando duro ampliando el espectro en el campo internacional, le está apostando a nuevos ejes en política exterior y no se distancia de los Estados Unidos. Esperamos que la nueva canciller colombiana, a través del diálogo franco y directo con Venezuela y Ecuador, logre avanzar en el manejo complejo de estas relaciones que son estratégicas y muy importantes por el carácter complementario de sus economías. Falta por conocer las acciones inmediatas con China, la India y el mercado centroamericano.

A la expectativa generada por la propuesta de unidad nacional vale la pena abrir un espacio para el tema de la salud que requiere un tratamiento de fondo por la situación de falta de recursos y debilidad institucional del sector. Otro caso es el de la justicia por la necesidad que opere un servicio del cual depende en buena parte la legitimidad del estado. Igualmente, merece especial atención la tierra. Es necesaria una reforma agraria, tanto por motivos de equidad como de productividad, que permita la incautación de los millones de hectáreas que siguen en poder de las mafias del narcotráfico.

Es importante mencionar el manejo que se la dará a la bonanza petrolera y minera. El país con los millonarios recursos que reciba deberá dar un salto tanto cualitativo como cuantitativo en su nivel de desarrollo que necesita consenso y buen juicio para decidir que parte de los recursos se ahorra y que parte se gasta.

El cuidado especial de las fuentes de agua y la energía sostenible son otras urgencias del nuevo gobierno de unidad que debe propiciar espacios de discusión alrededor de los grandes propósitos nacionales que permita a los colombianos iniciar de manera civilizada y optimista el tercer siglo de independencia, porque ya es hora que terminen los cincuenta años de soledad, tragedias, narcotráfico y guerrillas, para que nuestra patria no se muera de tristeza y de pobreza y  sobre todo, para que el mundo deje de mirarnos con “atención cansada y compasiva”.
gustavocotesm@hotmai.com

Categories: Columnista
Gustavo_Cotez_Medina: