En un predio rural denominado San Martín de Loba, vereda Los Palmitos, jurisdicción de Villa Germanía, se talaron de manera ilegal un grupo de árboles que estaban en la margen derecha del río Diluvio, cuenca hídrica que recorre todo el corregimiento de Villa Germanía, Valledupar, y es utilizada para subsanar la necesidad de agua potable de los habitantes de esa zona rural.
De acuerdo con Navis Ruizdíaz, inspector de Policía de Villa Germania, la tala y quema de árboles fue a finales del mes de abril, pero fue notificado del hecho el pasado mes de mayo debido a que la zona donde se realizó la actividad está al pie de la montaña de la Sierra Nevada, sitio retirado de la cabecera del corregimiento.
En ese sentido, el pasado 28 de mayo, Ruizdíaz en compañía de Euclides Monte Rey, edil de dicho corregimiento, y Ubaldo Mercado, presidente de la Junta de Acción Comunal, JAC, realizaron una visita de inspección al área. Según el inspector de Policía encontraron que habían sido talados árboles caracolí (Anacardium excelsum), guamo (inga codonantha), laure (laurus noblis), roble (quercues robur), entre otros.
Según Ruizdíaz, las personas que realizaron dicha actividad son campesinos sembradores de legumbres en el predio San Martín de Loba. Acotó que los trabajadores del campo decidieron talar las plantas y quemar el terreno para sembrar maíz.
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“Los que talaron y quemaron los árboles a la orilla del río Diluvio son dueños del predio. Sin conocimiento de causa realizaron la tala porque solo pensaban en expandir la actividad agrícola que realizan. Sin embargo, está prohibido cortar árboles cercanos a las cuencas hídricas porque afecta la composición del afluente, y el suministro de agua para el resto del corregimiento”, manifestó el inspector de Policía.
Ante la falta ambiental, el funcionario citó a Manuel Mercado, dueño del predio San Martín de Loba, y padre de Luis Mercado, presunto infractor, para que firmara un acta que lo comprometía a reforestar el área afectada con el siguiente número de especies: 30 árboles caracolí (Anacardium excelsum), 50 robles ( quercues robur), 100 especies de laure (laurus noblis) y 120 guamo (inga codonantha).
El oficio fue firmado por Mercado el día de ayer, y se comprometió a velar por la reforestación de la zona. En ese sentido, Mercado aseveró que no tenía conocimiento de la tala de árboles que realizó su hijo porque no estaba en el predio cuando sucedió. Relató que se dio cuenta del daño ecológico cuando era tarde, pero está dispuesto, al igual que su hijo, a resarcir el daño.
CORPOCESAR
Debido a las denuncias de la comunidad de Villa Germania sobre la tala de árboles, Irlena Guillén, ingeniera ambiental de la Corporación Autónoma Regional del Cesar, Corpocesar, visitó la villa para hacer un informe técnico de la zona afectada, pero no fue posible que la funcionaria evaluara el área por condiciones climáticas que impidieron el acceso al terreno montañoso.
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De acuerdo con Guillén, la visita será programada para cuando la temporada de lluvia termine, porque para acceder al lugar tiene que atravesar caminando el río Diluvio, el cual cuando llueve se crece dificultando cruzarlo.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA VEGETACIÓN?
El ingeniero forestal Sergio Hurtado explicó que la cobertura vegetal en los ríos reduce la sedimentación y sirve como barrera protectora para impedir la entrada de contaminantes al medio acuático. Además, contribuye a la conservación de la biodiversidad porque brinda las condiciones para la presencia de especies terrestres y acuáticas como aves, anfibios, ranas, reptiles, entre otros.
Agregó que al ser talados los árboles y plantas ubicados en las orillas de una cuenca hídrica, estos deben ser reemplazados por la misma especie vulnerada, principalmente, porque los otros tipos de plantas no cuentan con las características necesarias para la estabilización del ecosistema e incluso no pueden prevenir inundaciones o deslizamientos.
Por: Namieh Baute Barrios / El PILÓN