Así como genera felicidad la llegada de un bebé al seno de una familia o cuando un paciente, luego de tratamientos médicos, mejora su salud, así fue nuestra emoción cuando recuperamos y se le dio vida de nuevo al HEAD San Martín.
El compromiso con nuestra gente fue acabar la larga espera de más de 81 mil usuarios de la Comuna 3; vallenatos de escasos recursos y necesitados de atención que debieron migrar a otros centros y clínicas, donde pagaban altos costos.
La tarea de darle vida al HEAD no fue nada fácil. Pasamos por inconvenientes propios de la obra, como una obstrucción en el Ministerio de Salud y tras auscultar el problema y varios meses de gestión, lo resolvimos.
Cuando creíamos que todo estaba dado para dar de alta el proceso de construcción, se nos fueron sumando otros problemas. La pandemia por COVID–19 resultó un duro golpe. No solo afectó a la sociedad vallenata, sino también a varios integrantes del cuerpo médico y, de paso, le ocasionó una parálisis a la obra.
Luego de nueve meses de cuidados y protocolos, y trabajar con solo la mitad del personal, se nos sumó un paro nacional que bloqueó toda intención de entregarle con oportunidad las instalaciones a Valledupar.
Justo para el 8 de marzo de 2022 cumplimos con la entrega de la infraestructura de Urgencias que no tiene nada que envidiarle a otros centros de salud de gran nivel, porque nuestro propósito ha sido dignificar la atención de la gente.
Y fuimos más allá, invertimos en el área de hospitalización con recursos del HEAD y el municipio, que complementará los servicios de Urgencias y garantizará calidad a los usuarios.
LE INYECTAMOS LA DOTACIÓN
Con la construcción de Urgencias y hospitalización, le bajamos la fiebre al desespero y los tantos razonables reclamos que diversos sectores hacían. Pero nos faltaba algo: la dotación.
Por eso consolidamos un proyecto de dotación que, con impuestos de la ciudadanía, permitió destinarle el 90 por ciento de recursos al hospital.
Le inyectamos 7 mil millones de pesos en: consultorio triaje, urgencias para gestantes, cuatro salas de procedimientos, sala de reanimación, equipo de radiología y ecografías, camillas para hombre y mujer, y una ambulancia último modelo.
Los tiempos de Dios son perfectos. Ahora, después de 7 años, puedo decir que “reanimamos” el HEAD San Martín y ahora el hospital tiene mucha vida para atender a nuestra gente.
Por Mello Castro González
Alcalde de Valledupar