La cristalización del proceso de paz en Colombia es según el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, el catalizador que necesita el país para que se active la economía, asegurando que los “recursos que antes daba el petróleo ahora lo dará la paz”.
Así lo manifestó ayer el alto funcionario en su visita a Valledupar, donde fue el principal ponente en el foro ‘Hacia dónde va Colombia: la Nueva Economía’, desarrollado en la Fundación Universitaria del Área Andina, donde extendió un mensaje de optimismo y confianza en las finanzas a las nuevas generaciones.
“Anteriormente los inversionistas no llegaban al país por desconfianza en la seguridad, al calificarnos como un país en conflicto. Hoy que estamos ad portas de firmar la paz y estamos esperanzados en que el turismo se reactive en todas las épocas del año y no en fechas específicas como ocurre en Valledupar en el marco del Festival de la Leyenda Vallenata”, aseveró.
Colocó de ejemplo este departamento, puesto que antes que el conflicto en Colombia escalara, el Cesar era una gran potencia agrícola, argumentando que “la mayor parte del departamento estaba cultivado; el algodón era una fuente de ingreso importante, al ser azotado por la guerrilla y paramilitares se espantó la inversión; la gente se salió de sus fincas y se dejó de invertir en el campo. Esa inversión volverá porque las tierras siguen siendo fértiles, teniendo en cuenta que se debe invertir en riego, maquinarias e infraestructura”.
Austeridad inteligente
Para Cárdenas Santamaría, el reto más grande que tiene el país es reacomodarse al bajón de precios del petróleo, que estaba a 100 dólares por barril y bajó a cerca de los 43 dólares, lo que significa que el gobierno perdió una fuente importante de recursos. “Tenemos que ajustarnos a esta realidad, donde el gobierno no va a recibir un solo peso del petróleo, es como un hogar que pierda una fuente de los ingresos, por lo que el jefe del hogar se ve obligado a reducir los gastos menos prioritarios. En el país debemos apretarnos el cinturón manteniendo las prioridades básicas, es lo que hemos denominado como austeridad inteligente”, acotó.
Las prioridades más importantes para el Gobierno Nacional están en educación, continuar con programas para reducir la pobreza como Acción Social, Colombia Mayor y de Cero a Siempre; así como infraestructura en vías 4G; y subsidios a la tasa de interés para vivienda, los cuales son de mayor cuantía para las personas de bajos ingresos.
Al respecto mencionó la necesidad que el Cesar cuente con una sede de la Universidad Nacional, así como tener en buen estado la vía entre Cuatro Vientos a Codazzi (para que sea una diferencia para redimir el potencial agrícola del departamento), poseer un adecuado transporte masivo y hacer realidad el Centro Cultural de la Música Vallenata.
Presupuesto del país.
Cárdenas Santamaría mencionó que el presupuesto del país en el 2017 será de 224.4 billones de pesos, donde en línea con el marco fiscal de mediano plazo pasará de representar el 19.2 % del Producto Interno Bruto, PIB, en 2016 al 18,8 % en 2017; una reducción del 0.4 % del PIB.
“Estamos comprometidos con una política salarial austera y un control estricto de las nóminas de personal, monitoreo sobre el monto y composición de la inversión pública, y una permanente supervisión del gasto público”, señaló el alto funcionario, indicando que el congelamiento de la nómina del Gobierno Nacional y los incrementos salariales se mantendrán a la par con la inflación.
El Ministro de Hacienda indicó que “en este presupuesto el obierno central hace un recorte de 3.7 billones de pesos en el rubro de inversión. Sin embargo, a través del Sistema General de Participaciones se transferirán 3.3 billones de pesos adicionales para la inversión en entes territoriales”.
Efectos del paro camionero
De acuerdo al Jefe de la cartera de Hacienda, el paro camioneros le pasó cuenta de cobro a la inflación e influyó en la decisión del emisor de incrementar en 25 puntos básicos la tasa de interés de intervención, situándola en 7,75 %.
“El paro camionero le pasó cuenta de cobro a la inflación. Si uno mira los datos a lo largo del mes de julio, los precios de los productos de la canasta familiar encuentra que alimentos como la cebolla o la papa llegaron a su pico más alto”, aseguró, agregando que “notamos que para estos últimos días del mes de julio, desde que se levantó el paro camionero, se ha recuperado el nivel de abastecimiento de las centrales de abastos en todas las ciudades del país”.
De acuerdo al Ministro de Hacienda, los cambios en la estructura de ingresos fiscales del país ha hecho necesario repensar el nivel y la composición del gasto público. Por eso habla de ‘austeridad Inteligente’.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN