Estábamos en mora de destacar el acierto del gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, de crear la Oficina Asesora Departamental de la Mujer para atender con mayor ahínco a la población femenina en todas sus esferas sociales.
Es un hecho que se cristalizó el diez de enero pasado cuando se posesionó del cargo Laura Toro, quien se desempeñaba como coordinadora departamental de Equidad de Género del Cesar. Es un paso importante para las mujeres del Cesar que exista en el gobierno departamental una Oficina estrictamente para atender las necesidades y fortalecer los procesos de construcción de la política de género que tanta falta le hace al Cesar.
Existen varios temas que la mujer del Cesar requiere que no se pierdan de vista en las agendas de los gobernantes. El primero es hacer cumplir las leyes, decretos y normas que garantiza que exista una vida libre de violencias. El segundo es la capacitación para que sean activas laboralmente y en tercer lugar que existan los espacios de igualdad frente al hombre, especialmente en la zona rural.
El anuncio de abrir la Casa Taller de la Mujer en Valledupar para que en una primera etapa más de 200 mujeres se formen en diferentes oficios, como confección, patronaje, marroquinería, calzado, panadería, artesanía, culinaria, entre otros, es un buen comienzo que luego podrá replicarse a lo largo y ancho del Cesar.
Apoyamos esta iniciativa e invitamos a las mujeres que sean mayores de 18 años, que estén en condición de vulnerabilidad, madres cabeza de familia o víctimas de violencia dentro y fuera del conflicto, a que acudan a este llamado del gobierno departamental para que reciban la formación que puede convertirse en una opción de ingresos económicos al hogar y que por ende ayuda a mejorar la calidad de vida de la familia.
Existen otros departamentos, como el Atlántico, donde se han desarrollado programas exitosos en el tema relacionado con la mujer, especialmente para el programa de expansión de las políticas públicas. Hizo bien la Asesora de la Oficina de la Mujer del Cesar en conocer el modelo aplicado en este departamento, donde el trabajo en defensa de los derechos de las mujeres a vivir una vida libre de violencia e implementación de la política pública ha sido exitoso.
Hoy como departamento pertenecemos a la Red Defensora de las Mujeres, enfocada en trabajar por un Caribe libre de violencia. Por ahí es el camino. Qué bueno sería que en nuestras páginas dejaran de aparecer noticias diarias sobre los hechos de violencia contra la mujer, es una realidad dura, pero es lo que ocurre, lo cual no quiere decir que sea lo correcto. Esas cifras pueden disminuir si existen mujer apoderadas de su rol, capaces de generar armonía y paz en su entorno.