A través de una acción de tutela grupal, los habitantes del barrio Los Milagros de Valledupar, buscan acabar el problema que durante más de 15 años los ha afectado de manera constante. Se trata de la fisura en un tubo madre que ocasiona derramamiento de agua potable sobre la carrera 5 Bis. Este caso no es el primero que se registra en la ciudad.
Esta calle, particularmente, no cuenta con pavimentación por lo que además de generarse desperdicio de agua, proliferación de mosquitos transmisores del dengue y demás; también se producen charcos sobre la calle, dificultando así la libre circulación de vehículos y habitantes.
Es importante mencionar que actualmente el departamento, y especialmente Valledupar, atraviesa por una ola de casos de dengue que tienen en alerta a las autoridades, por lo que están implementando estrategias de fumigación y concientización para evitar que las cifras sigan aumentando.
Por otro lado, una de las preocupaciones de esta comunidad es que el mundo en general está pasando por afectaciones como consecuencia del cambio climático; la Capital Mundial del Vallenato, de acuerdo a expertos, será uno de los territorios más azotados por estas alteraciones en el ambiente. “A nivel mundial se está acabando el agua y aquí en Valledupar hace 15 años se está dejando perder agua potable”, manifestó una habitante.
Yuseiny Álvarez Martínez, miembro de la Junta de Acción Comunal, JAC, del barrio Los Milagros, informó al diario EL PILÓN que el derramamiento de agua es constante y en épocas de lluvia ‘la situación empeora’. “Eso fue que alguien se pegó al tubo madre ilegalmente y se desarrolló esa fisura hace más de 15 años, y desde entonces el problema permanece”, expresó.
Ante esta situación que ya completa varios años, Álvarez Martínez ha tratado de buscar soluciones con la entidad correspondiente (La Empresa de Servicios Públicos Acueducto y Alcantarillado de Valledupar, Emdupar); no obstante, asegura que no ha habido diligencia por parte de la entidad que presta este servicio.
“Hemos hablado con Emdupar, y de hecho, yo vi cuando nos anotaron en el libro de inventario que ellos tienen, y estábamos como de cuartos en la lista, en ese momento me dijeron que al día siguiente iban a ver ese problema. Al día siguiente llovió torrencialmente y de ahí se olvidaron de nosotros. Emdupar no ha querido venir a arreglar el problema, aun cuando es muy fácil resolverlo porque es una calle que no está pavimentada así que no tienen que romper cemento”, puntualizó la miembro de la JAC.
Ketty Jannith Gutiérrez Maestre/EL PILÓN