Imelda Daza Cotes
En Suecia, un país mayoritariamente protestante, la Navidad es ante todo una fiesta de la familia, sin mucha connotación religiosa.
En este país, el más laico del mundo, la celebración navideña involucra a todos los ciudadanos, creyentes y no creyentes; las actividades buscan destacar y fortalecer los vínculos familiares y contrarrestar el rigor del clima.
Es una fiesta muy ligada a la mitología escandinava y a su dios Thor así como a los santos cristianos primitivos.
El paisaje invernal rigurosamente blanco, el frío extremo y la oscuridad, son los rasgos predominantes de la Navidad en este mundo nórdico. La nieve lo cubre todo y su blancura contrasta con la penumbra ambiental; en esta época los días son muy cortos y las noches muy largas, de ahí que la luz sea un elemento central en las festividades.
La celebración navideña es larga, comienza el primer domingo de adviento cuando se enciende la primera de las 4 velas en un candelabro especial y se bebe ponche navideño(especie de vino) caliente, muy dulce, aderezado con especias, uvas pasas, almendras y se comen galletas de jengibre y panes de azafrán.
Pero ya el 1 de diciembre se abre la primera ventanita del calendario navideño que cuelga en la pared y guarda para cada día un chocolatico para los niños; es una manera de hacer menos ansiosa la espera de los aguinaldos de la Nochebuena. Luego, el 13 de diciembre se conmemora a Santa Lucía -la siciliana diosa de la luz- con conciertos y procesiones en todos los lugares públicos y de trabajo, escuelas, iglesias, guarderías, oficinas, fábricas, ancianatos, hospitales y plazas. A todas partes van grupos de niños/as y jóvenes ataviados con túnicas blancas y lazos rojos y rodeando a “Lucía” -una chica que porta una corona con velas encendidas- entonan villancicos y canciones tradicionales alusivas a la santa portadora de paz y de luz. También este día se bebe el ponche caliente y se comen galletas después de la procesión.
El árbol de Navidad es otra de las tradiciones, se arma con un pino natural piramidal que puede comprarse en los mercados navideños, se decora con banderitas suecas, manzanas, gnomos con sombreritos rojos y muchas luces que se prenden hoy 24 de diciembre.
La decoración navideña está muy marcada por las estrellas “de David” y los candelabros de siete brazos iluminados, que se colocan en las ventanas de las casas y edificios en todo el país.
La cena navideña es un bufé típico compuesto de una gran variedad de platos que incluyen el famoso jamón navideño, chorizos, salchichas “príncipe”, albóndigas, salmón marinado, arenque, paté de hígado, bacalao macerado, otras variedades de pescados, ensalada de remolacha, torta de papas y pan duro.
Esto se acompaña con “julmust” (bebida no alcohólica, a base de lúpulo y malta), cervezas y aguardiente. De postre hay dulces variados y arroz de leche con mucha canela. Esta costumbre de la cena abundante parece provenir del viejo mito de los dioses nórdicos y sus festejos en Valhalla asociados a su vez a las tradiciones vikingas.
La leyenda dice que este bufé se dejaba servido durante la noche de Navidad para que también los muertos compartieran de sus delicias y festejaran.
En Suecia, al igual que en otros países europeos la gran celebración de Navidad ocurre el 24 de diciembre, empieza a mediodía con la cena navideña que congrega a abuelos, padres, hijos y otros parientes y constituye el evento familiar más importante del año.
Al terminar la cena se encienden las luces del árbol, un rato después aparece “Jultomten”, la versión sueco-luterana del Papa Noel o Santa Claus, con un saco lleno de regalos para todos.
De este personaje dice la leyenda nórdica que son gnomos que viven debajo de las casas y en el invierno salen a pasear en trineos jalados por cabras.
Este “duende” es usualmente representado por la persona de mayor edad en la familia; como costumbre, fue vetada oficialmente en la Edad Media, pero ya se había impuesto y persistió
Otra tradición, extraña para muchos, consiste en mirar, la víspera de Navidad a las 3 de la tarde, una película del Pato Donald que incluye los mismos episodios desde hace 45 años. Es algo que nadie sabe explicar por qué pero los muñequitos de Donald congregan frente al televisor a buena parte de los 9.3 millones de habitantes de este país.
Terminada la película se abren los aguinaldos.
La Navidad termina el 13 de enero, día de San Knut cuando se desviste el árbol de Navidad que se tira al bosque de donde provino y se entonan más canciones navideñas