Hoy no es un viernes cualquiera, hoy se conmemora la 26ª edición del Día Mundial de la Libertad de Prensa, bajo el tema “Medios para la democracia: periodismo y elecciones en los tiempos de la desinformación”.
La edición 2019 se centra en los desafíos actuales a los que la prensa se enfrenta durante las jornadas electorales, así como el papel del periodismo en los procesos de paz y reconciliación. Una conmemoración que pareciera hubiese sido pensada de manera especial para la prensa en Colombia.
Hay que recalcar que la libertad de expresión es un derecho fundamental, como lo establece el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.
Este día es una oportunidad para celebrar los principios fundamentales de la libertad de prensa; evaluar la situación de la libertad de prensa en el mundo; defender los medios de comunicación de los atentados contra su independencia, y rendir homenaje a los periodistas que han perdido la vida en el cumplimiento de su deber.
En ese sentido, ayer la Federación Colombiana de Periodistas, Fecolper, en la conmemoración de 12 años de su creación, acompañó una significativa iniciativa de Periodistas Asociados de Bolívar con la instalación una exposición fotográfica denominada ‘El sendero de la memoria’, con las fotografías de 158 periodistas asesinados en Colombia desde 1977. La exposición, ubicada en el camellón de los Mártires de la ciudad de Cartagena, cuenta brevemente la historia de los periodistas sacrificados por su compromiso por la verdad, por cuenta de guerrilla, paramilitarismo, narcotráfico y agentes del Estado.
En actividad fueron instaladas las fotografías de dos periodistas de nuestra región, asesinados cuando hacían valer el derecho fundamental a la libertad de expresión. Se trata de Amparo Jiménez, corresponsal de noticieros de televisión nacional, acribillada el 11 de agosto de 1998 en el barrio Cerrito de Valledupar; y Guzmán Quintero Torres, quien fue jefe de redacción del diario EL PILÓN hasta el 16 de septiembre de 1999, día en que lo baleó un hombre que irrumpió en un establecimiento del centro de la capital del Cesar, donde el periodista departía con dos colegas.
En ese sentido, exigimos a la Fiscalía General de la Nación que declare de lesa humanidad los crimines en los que no se ha podido hacer justicia, para que las investigaciones no cesen y puedan ser procesados los autores intelectuales.
Fecolper recuerda que este año prescriben siete casos de periodistas asesinados, entre esos el de Guzmán Quintero Torres, lo cual sería un duro golpe a la libertad de prensa y un impulso a la impunidad.