Terminó el Festival de la Leyenda Vallenata y las autoridades entregaron las cifras del orden público durante las fiestas: una reducción del 75 % en delitos como lesiones personales, hurtos a residencia, hurtos a comercio y hurto de vehículos. Un orgullo para la Policía Nacional y las autoridades administrativas.
“En ninguno de los eventos de afluencia masiva se registró homicidio”, se recalcó el pasado jueves 2 de mayo durante la entrega del balance. Sin embargo, en materia de seguridad algunas cosas cambian en los días posteriores al Festival.
Empezando por la trágica noche del viernes 3 de mayo. Primero impactó la noticia que un sujeto que se desplazaba en motocicleta acabó con la vida de Ilina María Guerra, en medio de un ataque con arma de fuego al noroccidente de Valledupar; a los pocos minutos se conoció que una riña protagonizada por dos jóvenes dejó como resultado un muerto en el barrio El Carmen.
Y el sábado 4 de mayo por la noche, la noticia fue el intento de asesinato a un profesor por presuntas razones pasionales. En 24 horas dos asesinatos y un herido, más que en casi dos semanas de fiestas.
“Con el pie de fuerza que llegó se redujeron los delitos en un 75 %. Una vez se van los policías y quedamos con el número reducido que tenemos, el delito impacta de nuevo”, reconoció el secretario de Gobierno, Gonzalo Arzuza.
“Hay varios factores que implican que durante las fiestas se reduzcan los delitos. Primero, la misma dinámica de la ciudad, la época de fiesta, el ambiente, además que aumenta el número de policías. Entonces todas las patrullas de seguridad ciudadana están enfocadas y reciben un apoyo adicional”, explicó el subcomandante de la Policía del Cesar, teniente coronel Jovany Benavides.
¿QUÉ PASA DESPUÉS DE FESTIVAL?
Fueron alrededor de 1.300 uniformados que llegaron a Valledupar para blindarla durante Semana Santa y Festival Vallenato. La ciudad estuvo custodiada y los resultados lo demuestran. Esté relacionado o no, con la marcha de los uniformados retornaron los grandes problemas de inseguridad.
Bajo las conclusiones posteriores al Festival Vallenato, la experiencia demuestra que la solución inmediata al problema de la seguridad en Valledupar es el aumento del pie de fuerza. Pero no es tan fácil. Por su lado, desde la administración reconocen la dificultad de sostener 1.300 policías más de forma permanente, pero solicitan reforzar al menos en la cuarta parte. “Ya no sería la misma cantidad que llegó para el Festival, que es lo que necesita Valledupar, sino unos 200 o 300 uniformados los que se están exigiendo porque son necesarios. Hemos hecho varias reuniones y estamos esperando que nos autoricen desde Bogotá”, agregó el secretario de Gobierno.
Solo para la semana de Festival fueron necesarios más de 1.000 millones de pesos para la estadía y alimentación de los uniformados, no obstante el funcionario señala que en otro movimiento “resulta mucho más económico”.
En ese sentido, el subcomandante de la Policía Cesar detalla que aumentar el pie de fuerza es un reto con varios protagonistas. “Traer más uniformados depende del mando central y del Ministerio de Hacienda. El problema de la falta de policías no es una situación particular de Valledupar, se repite en muchas ciudades del país y esa petición se le escucha a muchas autoridades municipales”, aseveró la autoridad policial.
En el caso de los homicidios, las cifras se pueden ver desde varias perspectivas. Por un lado, en el mes de marzo el alcalde de Valledupar, Augusto Ramírez, aseguró que “hasta el momento se puede decir que la ciudad ha avanzado. La media nacional es de 25.5 homicidios por cada 100 mil habitantes, mientras que en Valledupar es de 17.5, quiere decir que el trabajo se ve”.
Sin embargo, comparado con el 2018, durante el 2019 los homicidios han aumentado, señala el comandante operativo de la Policía Cesar, coronel Fredy Delgado. “En el fin de semana se presentaron hechos lamentables que costaron vidas, dos de ellos el viernes. Estamos en un aumento del 10 % respecto al año anterior, sin embargo se sigue trabajando con el tema de los microcuadrantes y focalizando zonas donde es más recurrente el tema de homicidios”.
La preocupación es que hasta el mes de mayo, el porcentaje de homicidios en el 2019 supera a un 2018 donde también creció la cifra. De acuerdo con Medicina Legal, el número de homicidios en el 2017 fue de 78 personas, mientras que en el 2018 fue de 87, un total de 9 casos más.
En 2019, en el departamento del Cesar la Policía registra 76 homicidios, el 36 % de ellos en Valledupar. Aunque en los números de Valledupar hay pequeñas diferencias. Mientras la prensa registra 30 homicidios, en su base de datos la Policía guarda registro de 28 homicidios en Valledupar en los primeros cinco meses del 2019. Así, en promedio hay un homicidio en Valledupar cada 4,4 días y medio, promedio que ha escalado dos décimas respecto a los primeros dos meses del año.
“La principal consecuencia de este incremento, es que hay que reconsiderar las políticas públicas de seguridad y preservación de la vida aplicadas en Valledupar. Autoridades municipales y policía local deben reforzar la estrategia. De una parte, no se puede definir, ni construir políticas públicas con datos erróneos, eso no es posible. No se lograrían los análisis acertados, pero sobre todo en este caso, estamos hablando de proteger la vida de los habitantes de Valledupar”, reza un informe publicado por el Centro de Estudios Socioeconómicos y Regionales, CESORE.
LOS MICROCUADRANTES Y LAS ESTRATEGIAS DE LA POLICÍA
Los microcuadrantes están divididos de forma estratégica para atender de forma más rápida alteraciones del orden público en las capitales. En los 268 barrios de Valledupar funcionan 31 cuadrantes. El problema es que la ciudad, según el Dane, ya cuenta con más de medio millón de habitantes y en cada cuadrante trabajan dos uniformados, 61 en total. Por eso, en muchos casos son insuficientes cuando los solicitan de forma simultánea.
“Tenemos unos puntos identificados como calientes. Se realiza un trabajo en ellos y se ve cómo los delincuentes se desplazan. Se trabaja una zona y se van para otra. Estamos trabajando para detectar con la Fiscalía y la Policía”, detalló el secretario de Gobierno, quien agregó que en la comuna tres y la comuna cinco persisten puntos calientes.
Recién llegaron 102 uniformados a reforzar el pie de fuerza vallenato pero aún sigue siendo insuficiente. Una de las soluciones presentadas es la Policía Metropolitana, no obstante, el proyecto es a largo plazo porque antes es necesaria la construcción de una primera fase funcional para atender los cerca de 700 uniformados que podrían llegar.
“Cuando la gente habla del pie de fuerza tiene la imagen de un policía en cada esquina. Pero no es así. Lo cierto es que necesidades de policía las hay en todo el país. En realidad, lo más importante para golpear el crimen son las estrategias de la institución”, agregó el subcomandante de Policía Cesar.
Dentro de las estrategias para controlar el delito, están las cámaras de seguridad. La Alcaldía invertirá alrededor de $ 1,059 millones en el mantenimiento del sistema de video vigilancia integrado por 392 cámaras de seguridad instaladas en considerados puntos estratégicos. Sin embargo, en últimos informes se habla de que alrededor del 12 % (50) de las cámaras no están en funcionamiento, lo que significa puntos ciegos en la ciudad.
En ese sentido, comprobado que terminado el Festival Vallenato históricamente repuntan algunos delitos por diversas razones, impera determinar estrategias que impidan el auge del delito.
DEIVIS CARO DAZA / EL PILÓN
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