“Tengo ganas de decirte que te amo
De que caminemos sobre un mar de estrellas
De llevarte para siempre de la mano
Y de no soltarte nunca hasta que muera”.
Bien dicen por allí que los compositores se inspiran y escriben canciones de cosas inimaginables, e incluso, de momentos ‘inocentes’. Este fue el caso de Wilfran Castillo cuando le surgieron las primeras letras de la canción ‘Tengo ganas’, inmortalizada en la voz de Felipe Pelaez.
En una entrevista, el artista relató la historia detrás de la exitosa canción. Según su relato, su hija, Valentina, hace 13 años, al llegar de la escuela le preguntó a qué se dedicaba.
“¿Pues qué más voy a hacer? Canciones y música. Y me respondió: ‘eso no es un trabajo’”, contó Castillo.
Perplejo ante la respuesta de su hija, el compositor entendió que era su primer día de clases y que en la escuela los profesores les habían pedido hablar sobre ellos y a qué se dedicaban sus padres.
“Los demás padres eran arquitectos, doctores, empresarios, y demás. Ella ignoraba el valor de ser compositor y de alguna forma me reclamaba por no ser de alguna rama profesional”, dijo.
Ante esto, decidió sacar su tarjeta profesional que lo acredita como abogado, su hija inmediatamente le respondió: “Eso sí es un trabajo, porque estar todo el día con la guitarra no lo es”.
Después, la menor le preguntó qué quisiera él que ella fuera cuando sea grande: “Lo que tú quieras, porque sé que como quieras yo te quiero”. Y con esa última frase nació la segunda estrofa de la canción.
“Tengo ganas de que seas lo que tú quieras
Porque sea como que tú quieras yo te quiero
Quiero que me quieras cada vez que quieras
Porque por anticipado yo te sueño”.