Por Hernán Maestre Martínez
Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para vida en Valledupar, La Paz y San Diego.
La globalización es una integración estrecha de los países y los pueblos del mundo, fruto de la reducción de los costos del transporte de las comunicaciones y del desmantelamiento de las barreras artificiales, por causa del flujo de bienes, servicios de capital, conocimiento, tecnología y personas.
Es energéticamente impulsada por corporaciones internacionales que no solo promueven el capital y los bienes a través de las fronteras, sino, también, la tecnología y, el conocimiento, todos con base en ese ideal de progreso y de universalidad que animó a la ciencia y a la filosofía moderna.
En el campo económico, como en el epistemológico, son muchos los aspecto de la globalización aceptados en todas partes; sin embargo, como piensa Stiglitz, los temas más limitados son los que han sido objeto de polémica, junto a las instituciones internacionales que han fijado las reglas y establecido medidas como la liberación de los mercados capitales (la eliminación de las normas y reglamentaciones de muchos países en desarrollo que apuntan a la estabilización de los flujos de dinero volátil que entra y sale del país).
La globalización económica trae consigo otros elementos diferentes de los anteriores. Al igual que circulan los bienes y mercancías, existe un elevado desarrollo tecnológico, una alta capacidad cientificotécnica que además genera la posibilidad de producir tales mercancías de alta calidad.
En ese orden de ideas, hay otro proceso muy interesante que es un soporte del proceso de globalización y es precisamente el tema de la información. Vivimos en un mundo interconectado por las comunicaciones, un mundo donde la información circula a lo largo y ancho del planeta a través de diversos mecanismos tecnológicos.
Así, el desarrollo tecnológico se convierte en la base impulsadora del mundo globalizado, cuya vanguardia son los países desarrollados de occidente.
Esto ha conducido a una reorganización del mundo, a una reorganización geopolítica, que hace que la dinámica de estos procesos esté enmarcada por la eficiencia, circulación, ubicación y producción de los productos posicionados en el mercado.
En ese sentido, se han derrumbado las fronteras nacionales ante el dominio de la lógica de la economía de mercado que termina ordenando el mundo. Por eso podemos decir que estamos en un mundo globalizado.