El próximo jueves 3 de junio del año en curso, a partir de las 8:00 a.m., hasta las 10:00 a.m., se desarrollará un interesante conversatorio de expertos panelistas, profesionales que garantizan un análisis sugestivo y una dinámica mirada al futuro de la educación superior frente al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible en la región.
Serán cuatro figuras de gran nivel profesional que brindarán su experticia para llevarnos por un adecuado análisis; desde luego es algo que se ha pedido a gritos hace mucho rato: que se mire en esta dirección y que además las universidades no se muestren reacias a los procesos de cambio que se exigen desde la comunidad.
Los panelistas nos brindarán desde su experticia la posibilidad de entender ese papel protagónico que deben desarrollar las instituciones de educación superior, como organizaciones ejemplares, como modelos técnicos, cognitivos y culturales de sostenibilidad que resalten la labor del estudiante y su rol para promover el desarrollo de la comunidad.
Esto requiere de cambios, profundos cambios que deben iniciar desde la actitud y el desarrollo de nuevos componentes de valores, promover una transformación cultural significativa, que inicie desde adentro, es decir, desde el rol del estudiante, de los docentes y el apoyo significativo de la dirección administrativa para atraer, y que le enfoquen desde afuera como un principio de dirección y liderazgo político, supremamente necesario. Una cultura organizativa para la sostenibilidad como compromiso de todos.
Resaltamos el trabajo de la doctora Alexis Vidal Brito, como jefe del departamento de Administración de Empresas, igual que sus pares de Contaduría Pública, Comercio Internacional y Economía de la Universidad Popular del Cesar, quienes con un equipo interesante de docentes, muy profesionales y dinámicos, se han dado a la tarea de llevar esta actividad, y reconocer estos escenarios y actividades como políticas de gestión de la UPC.
Son varios los objetivos sobre los cuales es necesario trabajar: combatir el hambre, la pobreza; brindar salud de calidad, garantizar la igualdad de género, brindar agua potable y saneamiento básico e higiene, entre otros, todos con un nivel de importancia interesante y de los cuales se adolece en muchos escenarios de la región.
Un análisis importante merece el servicio de educación de calidad, y de esto padecemos en todos los niveles. Se necesita para ello una serie de factores: profesores cualificados, garantizar una infraestructura de nivel, cobertura total, y luchar contra la deserción escolar y la dificultad de acceder al nivel superior en el sector público y más para acceder al sector privado. Demasiado costoso.
El reto es grande, se debe promover el dialogo, la participación, que no se silencien la voces y que los modelos buenos deben aplicarse de manera especial. Promover estos conversatorios nos da vida y nos pone a pensar, interesante ejercicio, en buena hora. Sólo Eso.