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La crisis de la UPC

Por: Nurys Pardo Conrado

Créanme, nunca había querido abordar el tema de la Universidad Popular del Cesar, atendiendo que soy egresada de ahí, y la escoba tiene que barrer por dentro pero cuando es necesario esconder la basura para que no se den cuenta de lo que se produce al interior; pero hoy la situación es insostenible, la UPC dejó de ser la entidad que realmente fue, las apetencias burocráticas de quienes tras bambalina las dirigen, han colapsado dicho centro de educación superior.

Diría que para la juventud del Cesar ha sido un fracaso, no en el plano educativo sino en lo administrativo, este centro de capacitación superior nació en  buena hora para satisfacer la tan deseaba superación de cada cesarense, sus forjadores no escatimaron esfuerzo para forjar en el plano local en anhelo que conjuntamente habíamos esbozado, pero la amargura nos llegó cuando un sector se amangualó con la clase política para hacer todo en cuanto iba en contravía de la comunidad estudiantil, hasta el punto de ser hoy un punto negro en la blanca historia de esta tierra de paz.

No puedo decir cuantos han sido los profesionales preparados por la UPC, porque ni ellos mismos, y cuando me refiero a ellos señalo a los directivos, saben cuánto es el índice de egresados, esto les importa poco, solo hacen esfuerzos para desacreditar el ente, sus directrices en los últimos 12 años han ido en dirección contraria, en ningún momento han alcanzado a dimensionar el compromiso histórico que les incumbe respecto a la sociedad civil, la Universidad estuvo también bajo la autoridad de los inmorales y a la fecha nadie hace nada por salvarla, parece que se volvió la corona que todos quieren tener a disposición.

Se ha venido de tumbo en tumbo, de caída en caída, sus directivos no han hecho uso razonable de la labor que les amerita cada quien tira para su lado sin tasar el gran perjuicio que con ello acarrea y aun que se está entregando al mercado un buen profesional no se le ha colocado en la vitrina que merece, pero vaya y enumere cuantos políticos la han tenido a merced, ella como Emdupar es la mayor bolsa de empleo para zacear los compromisos electoreros. Mientras que en otra parte la Universidad sirve de órgano de investigación, aquí por el contrario se mantiene como una finca de pocos bajo las ansias de quienes mayoritariamente acceden al poder.

No contamos, para decir algo, con un ejemplo real, ver en la Facultad de Sociología levantar junto con el cuerpo profesional la memoria histórica de la región, tanto hay que anotar que sería una forma de que los que no conocen la historia o quienes no la conocen se enteren de la ocurrencia, ni menos lo más fácil llevar un convenio de cooperación con otros centros de mayor rango para que pudiéramos conocer aspectos como lo económico, geográfico, político y demás sucesos que tanta valía que esta puede dirigir.

El objetivo de aquel recordado Ituce, dado al servicio de la comunidad por el doctor Jaime Murgas Arzuaga, cuando estuvo en el parlamento, murió ese ideal de constituir líderes, profesionales honestos e integrales, se torció sin que ellos sean los responsables, esa culpa la tienen los corruptos, personas que como Rico Mc. Pato, reflejan en su pupila el signo peso y hasta no tenerlo a disposición personal no descansan.

Eso era lo que no quería decir, porque la Universidad es mi casa, allí vi coronar mi visionada ocupación profesional, de su cuerpo docente tengo el mejor de los criterios, pero veo con temor como los honorables consejeros o quienes lo representan, han torcido el querer de un pueblo, desafiando de por sí las normas que internamente la rigen, pero lo más significante es que no encontramos un Moisés que la saque del desierto y la lleve al sitio prometido, el interés por ella se ha perdido, y ni la más honrada personas que podían tomar la batuta acogen la decisión de rescatarla con un movimiento moralista.

Antes en pensar en quien puede ser el Gobernador o el Alcalde, Diputados y Concejales, obremos en favor de la UPC, exigiéndole en una sola voz a los consejeros que escojan al mejor, a un rector que esté comprometido con el Cesar y con sus gentes, con los jóvenes y con todo lo que concierne al mejoramiento en la vida, porque solo así podemos salir del subdesarrollo.

Nurispaco@hotmail.com

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