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“La construcción de la universidad en La Jagua de Ibirico es la obra más importante para el municipio”: alcalde

Ovelio Jiménez, alcalde de La Jagua de Ibirico, aseguró que el oficio no describe supuestas fallas. /FOTO: JOAQUÍN RAMÍREZ.

EL PILÓN dialogó con el alcalde de La Jagua de Ibirico, Ovelio Jiménez, sobre su paso por la Alcaldía. El alcalde destacó algunas obras y habló sobre la época de vacas flacas.

¿Qué significa la sede de la UPC en La Jagua de Ibirico?

La noticia más importante en la historia del municipio, y del centro del Cesar, en cuanto a obras de desarrollo, es la construcción de la sede de la Universidad Popular del Cesar en La Jagua de Ibirico. 

Estamos hablando de romper con esa cadena de subdesarrollo en la formación y cobertura de la educación superior. Uno de los indicadores más bajos del centro del Cesar es el acceso a la educación superior. Muchos padres no pueden mandar a sus hijos a estudiar a las capitales, sobre todo los de estrato 0 y 1. 

Esta sede permitirá que los jóvenes de La Jagua de Ibirico, Becerril, Astrea, Chiriguaná, Codazzi, El Paso, tengan a menos de una hora una sede universitaria. La Jagua se convertirá en un eje estratégico de desarrollo. 

¿Cómo será la formación?

Será la primera universidad de la transición minero energética. Es decir, vamos a convertir esta universidad en un centro piloto de formación. La universidad no ofrecerá las mismas carreras. Nos enfocaremos en la agroindustria, energías alternativas, paneles solares, todo hacia el desarrollo económico. 

Luego de más de 15 años en la incertidumbre parece que están cambiando las cosas en Boquerón…

El corregimiento pasó de la mayor incertidumbre que ha vivido un pueblo en Colombia, abandonado, 15 años sin ninguna inversión, a ser uno de los corregimientos con mayor proyección en el departamento del Cesar, gracias a la concertación entre el Gobierno nacional, departamental, municipal, las empresas y las comunidades.

En Boquerón se está construyendo una escuela nueva, un centro de adulto mayor nuevo; se construirán 424 viviendas prácticamente nuevas. Se construirán polideportivos, canchas, parques, centros de salud. El municipio intervendrá con alcantarillado; a través de la Gobernación tendrán gas natural.

Este caso fue destacado como exitoso por el Departamento Nacional de Administración Pública. La comunidad pasa de un desierto y abandono a tener una expectativa de desarrollo. 

Con la minería de salida, ¿cómo está la zona rural? 

Desde el inicio nos propusimos transformar económicamente La Jagua de Ibirico. Venía un desequilibrio entre la inversión en la parte urbana y rural. Logramos invertir el 65 % de nuestros recursos en el sector rural y el 35 % en la zona urbana. Esa pirámide la volteamos. 

Tenemos 69 kilómetros de vías rurales intervenidas. Eso jamás había ocurrido. Hicimos un proyecto de café en 162 hectáreas que se convertirán en $20.000 millones en ingresos para nuestros cafeteros. La Jagua de Ibirico pasó de ser el cuarto productor de café a ser el segundo, detrás de Pueblo Bello. 

En La Jagua de Ibirico tenemos 4 fortalezas: el cacao, el cual da la garantía de sostenibilidad a corto y mediano plazo; el café, la ganadería y las especies menores (ovino caprino, cerdos). Ahí focalizamos nuestra estrategia. 

¿Cómo mejorar la operación de la planta de beneficio de La Jagua de Ibirico? 

Tenemos la única planta de beneficio  del departamento avalada por el Invima para el sacrificio de cerdos. Lastimosamente el socio comercial no ha entendido la dimensión de la planta. Por eso estamos realizando un proceso para que la ceda y se la entregue a empresarios con mayor capacidad para el aprovechamiento. Podríamos sacrificar 200 cabezas diarias. 

En materia de ingresos, usted fue el alcalde de las vacas flacas…

Fueron cuatro años difíciles. La Jagua de Ibirico pasó de ser un municipio de gran bonanza a tener los recursos muy limitados. A raíz de la salida de Prodeco perdimos 5.000 empleos de la noche a la mañana. ¿Cómo reemplazamos eso? 

Además llegó la pandemia. La Jagua de Ibirico pasó de tener un promedio de $25.000 millones de recaudo por industria y comercio en el 2019, a $9.000 millones en el 2020. Tenemos 60.000 habitantes. Ningún municipio del Cesar ha crecido tanto como La Jagua. En 2012 éramos 36.000. Es algo insólito y desborda cualquier expectativa de cubrir las necesidades. A pesar de todo, el municipio sigue creciendo de forma ordenada.

¿De dónde vienen los migrantes? 

En nuestra base de datos tenemos 5.000 migrantes que llegaron de Venezuela. Y tenemos alrededor de 15.000 personas que han llegado de todo el país. Lo desafiante del asunto es que la mayoría viene con una mano adelante y otra atrás, buscando oportunidades. Solo el 10 % llega a invertir. 

Personalmente, ¿cómo se siente al terminar su mandato?

Todo lo hicimos por el amor que se le tiene a La Jagua de Ibirico. Siempre se actuó de buena fe, con el objetivo de trabajar las 24 horas del día. Siempre hay sentimientos encontrados. Nostalgia, porque se quiso hacer mucho más, pero también se siente satisfacción por el deber cumplido. 

Un consejo para el nuevo alcalde…

Primero, no abandone el desarrollo agroindustrial que tiene el municipio; segundo, que no se comprometa de manera individual, que piense más en lo colectivo; tercero, que trabaje por la unidad, y cuarto, que se asesore de los mejores.

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Deivis Caro Daza: