Al igual que el Covid-19 que se está expandiendo por todo el planeta, se creía que las cepas de la comisionistis, estaban erradicadas, pero un inesperado acontecimiento puso en evidencia su reaparición. Fue por allá en 1986, cuando se ventiló la posibilidad de que Colombia fuera escogida como sede para la realización del Mundial de Fútbol, noticia que generó grande expectativa entre los amantes de este deporte, correspondiéndole al Presidente de entonces, Belisario Betancur, decidir si aceptaba, la postulación.
El mandatario, haciendo gala de vasta su experiencia en el campo político, y no siendo partidario de la postulación, optó por nombrar una comisión que se encargara de estudiar la viabilidad de realizar el magno evento en nuestro país. La comisión hizo, lo que de ella se esperaba, y el mandatario declinó la invitación hecha por el máximo rector del fútbol internacional. Finalmente, el apoteósico evento se realizó en México.
Pues bien, a propósito de recientes declaraciones informales rendidas desde Caracas por la polémica Aída Merlano, el recién nombrado fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa, en principio decidió ignorar las acusaciones de la fugitiva, pero en vista de que la Corte Suprema de Justicia ordenó que se iniciará formalmente la solicitud de extradición de la prófuga de la justicia, se pellizcó y hábilmente le tiró la papa caliente al Consejo Nacional Electoral, habida consideración de los señalamientos que hizo, a la campaña del hoy presidente Iván Duque Márquez.
El Consejo Nacional Electoral hábilmente procede a nombrar una comisión de investigación, que me da la impresión hará lo que de ella se espera, y todo seguirá igual, y dentro de poco tiempo nadie se acordará del incidente.
Es la manera histórica de resolver algunos asuntos “incómodos” de manera elegante, dejando la responsabilidad en una comisión que cumplirá a cabalidad con hacer, lo que de ella se espera. Queda una vez más en tela de juicio la forma de elección del fiscal general de la Nación, pues en mi opinión el presidente no debe tener ninguna injerencia, a efectos de preservar la independencia y autonomía del ejecutivo, el legislativo y el órgano jurisdiccional.
Nota de cierre: se adelantan en el Centro Histórico de Valledupar obras de reposición de las redes húmedas y pavimentación. La pregunta del millón: ¿Estarán estas obras finalizadas para el 29 de abril, fecha en la que se dará inicio a la 53° versión del Festival de la Leyenda Vallenata?