Ituango, población en el departamento de Antioquia, allí está ubicada la ambiciosa represa, la más grande de Colombia, con la cual se le piensa dar Luz a más de diez millones de personas.
El represamiento del rio Cauca en este sitio, es una colosal mega obra que está en boca de todos los colombianos, a raíz del colapso de este proyecto debido a la improvisación en los estudios de suelos para erigir su infraestructura.
Mal cálculo que llevo a las aguas represadas en el embalse rebasar la presa y haya generado una emergencia que puede destruir los pueblos que se encuentran en el litoral del río Cauca.
Esos pueblos, aldeas y veredas de Antioquia, que hoy conocemos en situación crítica, fueron dados a conocer al mundo por nuestros juglares campesinos hace muchas décadas, ellos anduvieron por esos lados, con acordeón al pecho en búsqueda de bienestar y aventuras amorosas.
Esos amoríos quedaron impresos en sus almas aventureras y canciones que han superado las barreras geográficas y del tiempo.
Ocurrió con la canción ‘Sielva María’, ella era una agraciada campesina que vivía en la finca “Convención”, ubicada entre La Pintada y Rusia, límites de Córdoba y Antioquia.
Al caserío de Rusia Alejo hizo una canción, ‘La Quema de Rusia’, cuando este sitio en una celebración religiosa medio pueblo ardió en fuego y murieron dos gitanos que llegaron al festín a echar la suerte, salieron mal librados
En ‘Convención’, conoció Germán Serna, a Sielva , él compositor de El Paso, hombre bien parecido, fornido, ojos verdes, rubio y nariz aguileña, salió de su pueblo por una agria disputa musical con su paisano Samuel Martínez, del cual se desprende su canción, ‘El Negro Maldito’, Los Zuleta Grabaron la estrofa, “Un hombre que está más sucio que un racho solo,/ se viene a limpiar las uñas con mi honradez ”.
El errante Germán, llego a Puerto Antioquia, Yarumal y Valdivia, poblados que están en la ruta del desbordado río Cauca.
En sus orillas, Serna hizo la canción a esa bella dama la describió como, “Fileña de pelo largo muy coposon/la joven tiene las cejas casi encontradas”.
Esta canción apareció con la firma y grabada por su paisano y amigo Alejo Durán Díaz, Años después Héctor y Adanies al grabarla le restituyeron el derecho autoral a Serna Daza.
En su recorrido por los el Valle de Aburra, Serna, llegó a la población de Cáceres, ubicado a orillas del Cauca en busca de las minas de oro, a falta del preciado mineral se encontró con lindas mujeres bañistas en playas del Cauca, ante este encanto para la vista no tuvo más remedio que hacer la canción ‘Muchachas Cacereñas en la Playa’, también la grabó Alejo.
De este canto usurparon la melodía varios compositores, hicieron, ‘Playa Blanca’, la cual tiene varios intérpretes.
En la localidad de Margento, corregimiento de Caucasia, por esos lares andaba ‘El Pequeño Gigante’ Julio De la Ossa, conoció a Rosalba Villa, mujer por la cual su lira lloro, la inmortalizó con ‘La Margentina’.