Por Aquilino Cotes Zuleta
EL PILÓN publicó el pasado 2 noviembre una noticia que tituló: “Presidencia quiere destronar a Kaleb Villalobos y a los Gnecco de Corpocesar”. Esa noticia ha causado curiosidad, sorpresa e intranquilidad. Parecía una noticia de inocentada, pero no.
La Corporación Autónoma Regional del Cesar –Corpocesar- es una entidad del Estado que para la actual vigencia 2024 tiene un presupuesto anual aproximado a los $30.000 millones, cifra que desconoce el jefe de prensa de dicha corporación, a quien, al parecer, le prohibieron hasta informar los números telefónicos de sus funcionarios dizque porque “no estoy autorizado”, dice.
Este medio publicó en noviembre que “en Corpocesar casi destronan del poder a Kaleb Villalobos y a los Gnecco, quienes han administrado la corporación durante más de 12 años. El 27 de octubre se citaron a los 13 consejeros directivos de la entidad para elegir al director para el periodo 2024-2027. Luego de varias horas tuvo que ser suspendida porque 10 consejeros fueron recusados”.
Cita el mismo medio que “esas recusaciones, en realidad, buscarían frenar una visible derrota. Porque el ajedrez político de Corpocesar dio un vuelco. En medio de la sesión del 27 de octubre, una mayoría de 7 consejeros pretendía elegir director apoyados por Presidencia, sin la venia de Kaleb Villalobos y los Gnecco, las fuerzas detrás de los últimos 3 directores. La estocada no se dio porque el gobernador del Cesar suspendió la sesión”.
Sin embargo, a finales del mes de diciembre, el gobernador convocó una asamblea extraordinaria con siete de los 13 directivos y fue designada como directora Adriana Margarita García Arévalo, funcionaria de la entidad. Ella es magíster en Gobierno, especialista en Gobierno y gestión pública, quien se venía desempeñando como Jefe de Planeación de la entidad. Dos días después, el gobernador encargado la posesionó, todo quedaba consumado.
Pero, el gobierno de Petro quien ha planteado dar un revolcón a las corporaciones a nivel nacional y evitar que siga el saqueo en esas entidades regionales denunció irregularidades en dicha elección. A través de su ministra Susana Muhamad comunicó que “esta semana de forma irregular se hizo la elección en Corpocesar, incluyendo la posesión inmediata de la directora por parte del gobernador del Cesar. El Ministerio de Ambiente (21 de diciembre) ha interpuesto tutela contra ese procedimiento. Esperamos cerrar este proceso que por primera vez el Ministerio de Ambiente pone el ojo de la ciudadanía”.
A finales de diciembre el radio periodista vallenato Alex Acuña Reales posteó que –extraoficialmente- “una fuente me informa que el gobierno nacional decidió intervenir a Corpocesar, sacan del puesto a la señora que fue elegida no hace mucho y nombran como interventor a Wilmen José Vásquez Molina, presidente del Sindicato Nacional regional de las Cards”.
Por lo tanto, la contienda está abierta, de un lado el gobierno de Petro y por el otro el clan Monsalvo Gnecco y Kaleb Villalobos. Incluso, por los corrillos se sostiene que la hegemonía en el poder regional pesa mucho más que el nacional y para contratar con Corpocesar los proveedores deberán tener el visto bueno de Kaleb y de JJ Monsalvo (¿?), mientras se resuelve jurídicamente la situación en Corpocesar.
Así están las cosas por Corpocesar, en donde parece que se practica la mayor afrenta contra una democracia, cuando el tirano subyuga el poder político y administrativo de manera unilateral.
También es osado el hermetismo que reina en la Corporación Autónoma Regional del Cesar y dan como “dueños” de Corpocesar a dos ciudadanos comunes y corrientes, suplantando alevemente lo establecido en nuestras normas. Hasta la próxima semana. Deseo feliz año para los lectores y sus familias.