Ayer los barrios vecinos de las invasiones los Guasimales y Francisco Javier, amanecieron bajo los efectos de los gases lacrimógenos y la zozobra, ante los desordenes desencadenados tras la desconexión realizada por Electricaribe, que dejó sin energía a todo el sector.
Luego de los disturbios del jueves, en la Calle seis de La Nevada, los habitantes y comerciantes piden seguridad a las autoridades, debido a que los actos de protesta dejaron dos heridos, locales comerciales dañados, como también actos vandálicos con los que atentaron contra la propiedad privada.
El caso es que los invasores ahora amenazan con incendiar los transformadores de los cuales se han servido durante años y con arremeter contra el mega-colegio del sector; intimidaciones repudiadas por la población de Valledupar que reconoce la necesidad de los invasores, pero también la ilegalidad de sus exigencias.
Habla el Alcalde
Ante la reacción de los invasores, el alcalde Fredys Socarras Reales afirmó que “rechazamos las acciones de hecho, las vías de violencia tienen todo nuestro rechazo, más cuando a esa comunidad la hemos atendido y ya le hemos gestionado proyectos de vivienda. Por lo tanto, los invito al diálogo y a imitar a Gandhi, que a través del silencio y de la paz logró la liberación de la India”. Además, indicó que la Corte Constitucional emitió un fallo a cerca de unas obligaciones que deberá acatar el municipio en cuanto a estas invasiones.
La situación
Las invasiones que empezaron a ser construidas en el sector noroccidental, afectan a los barrios La Nevada, Villa Consuelo, Futuro de los Niños, Las Rocas, entre otros que han tenido que ceder a la manipulación ilegal de las redes que deja a los usuarios con energía intermitente y gran parte de los electrodomésticos quemados por los bajonazos en el fluido.
Durante la semana pasada, la empresa Electricaribe se reunió con el Alcalde de Valledupar, con el secretario de Gobierno Municipal, Carlos Felipe Quintero, y las autoridades policivas, quienes ya estaban preparados para los disturbios.
La jefe de la Delegación Cesar de Electricaribe, Mónica Hoyos Batista indicó que desde el inicio de la semana, contratistas de la empresa asistieron a los barrios para retirar los cables instalados de manera ilegal con los que llevaban energía a las invasiones y luego del proceso, han intentado una y otra vez conectarse nuevamente.
La jefe de la delegación Cesar aseguró que todo kilovatio que entra al departamento, debe ser cancelado al generador de energía y la ilegalidad ha creado fracturas que han terminado por afectar a la comunidad y a la empresa, ya que en lugar de aportar a la inversión para mejorar el servicio, la empresa se ha centrado en solucionar la manipulación de las redes en los diferentes barrios aledaños a las invasiones.
Una de las propuestas de Electricaribe es que el municipio aporte Energía Social a las invasiones, para contar con redes técnicas subnormalizadas, pero se necesita de un proceso de transición para legalizar, y asignar recursos del fondo de la nación.