El hambre y las diferentes necesidades que pasan las 50 familias que invadieron los albergues construidos por la administración municipal en inmediaciones del barrio Francisco Javier, al noroccidente de Valledupar, los llevaron a visitar diferentes medios de comunicación para visibilizar la crisis humanitaria que afrontan luego de desalojar de forma voluntaria.
Rosalbina Bolívar, una de las invasoras, contó que salió voluntariamente de los albergues esperando apoyo del gobierno, “pero ahora resulta que unos viciosos se metieron a esos albergues y se los han llevado a ellos para organizarlos, así no es justo”.
Manifestó esta mujer que ahora vive junto a otras madres y 11 niños en una casa cercana a los albergues, donde uno de los menores tiene una pierna fracturada y no ha recibido atención médica.
“Ya llevamos cuatro desplazamientos y a donde quiera llegamos, siempre nos tiran a la calle como perros, queremos que nos tengan en cuenta”, reiteró.
Agregó Bolívar que en el sitio donde se encuentra los 11 menores se acuestan sin comer, y luego de la orden de desalojo de los albergues no han recibido ayuda alguna por parte de la administración municipal.
Las madres cabeza de familia, que también fueron desalojadas de los albergues en el barrio Francisco Javier, aseguran que son desplazadas por la violencia y no han recibido ningún tipo de ayuda del Estado.
Por Jennifer Del Río Coronell
jenniferdelrio@gmail.com