A pesar de que el bocachico, pez habitual en el río Ranchería, cuenta con algunas poblaciones en el tramo del río que atraviesa la operación de Cerrejón, al sur del complejo minero fueron introducidas 220 mil crías de esta especie, por especialistas de Cerrejón, con el propósito de aumentar la población existente, fortalecer la cadena alimenticia y asegurar su sostenibilidad en el tiempo.
En los arroyos que corren en diversas áreas de Cerrejón, el bocachico representa el mayor volumen de peces. Sin embargo, históricamente, en la cuenca del río Rancheria esta especie ha sido el principal recurso de consumo local y dada su importancia por el papel que desempeña en la cuenca del Ranchería se desarrolló esta iniciativa en alianza con piscicultores de la comunidad de Papayal, quienes desarrollaron y apoyaron todo el proceso técnico y de reproducción.
“Conservar las especies amenazadas y, en general, la fauna silvestre, es una muestra de responsabilidad ambiental de parte de Cerrejón. Pero también es una invitación a la sociedad civil a que se unan a estos esfuerzos por conservarlas y mostrar los beneficios ambientales que estas proveen dentro de los ecosistemas del departamento de La Guajira”, afirmó Luis Madriñán, gerente de Gestión Ambiental de Cerrejón.
Los ejemplares, que fueron liberados en cuatro puntos estratégicos, son un producto exitoso del programa de monitoreo y seguimiento de fauna en el que la compañía analiza la composición de las especies, su abundancia, diversidad y distribución espacio-temporal, para la toma de decisiones encaminadas a la preservación y cuidado de la biodiversidad del departamento de La Guajira.