Cuando escuchamos hablar de inteligencia artificial (IA), puede sonar como algo de otro mundo, pero en realidad es una herramienta que transforma nuestra manera de vivir y trabajar.
¿Cómo funciona la IA? Imagina que tienes una caja que puede aprender de todo lo que ve, escucha y lee. Si le enseñas fotos de perros, empieza a reconocerlos y puede diferenciar entre un perro y un gato. Es como aprender a distinguir colores o formas jugando. Esa caja representa a la IA: aprende observando y escuchando, pero solo hace lo que nosotros le enseñamos.
¿Para qué sirve? La IA está presente en muchas de las actividades que hacemos todos los días. Por ejemplo: cuando preguntas a tu teléfono cuál es el clima, esa respuesta viene de una IA; los dibujos animados y películas muchas veces se mejoran con IA para que luzcan más realistas; en los videojuegos, los personajes que actúan como si pensaran usan IA para hacerlo.
Un salto en la evolución humana. A lo largo de la historia, los grandes inventos han impulsado el avance de la humanidad de manera exponencial. Por ejemplo: la invención de la rueda aceleró el progreso 10 veces; la imprenta multiplicó el conocimiento 100 veces; la computación nos permitió avanzar 1.000 veces.
La llegada de la IA representa un salto aún mayor, con posibilidades infinitas. Solo en mi tiempo de vida, he visto más avances tecnológicos que en toda la historia de la humanidad. Imaginen lo que podremos conseguir con la ayuda de la IA en los próximos años. Es un verdadero brinco en la evolución humana, y no hay que verla con temor, sino como una oportunidad para aprender y crecer.
¿La IA puede reemplazar a las personas? La respuesta es no. La IA es una herramienta, como un lápiz o una calculadora. Un lápiz no puede escribir solo; necesita que alguien lo use. De la misma manera, la IA necesita que una persona decida qué quiere hacer con ella. Por ejemplo, un doctor puede usar IA para analizar rápidamente cómo curar una enfermedad, pero la decisión final siempre la toma el doctor.
Además, ya hay muchas oportunidades relacionadas con la IA para quienes deseen aprovecharlas. Desde entrenar modelos de IA hasta revisar las respuestas que genera, existen tareas para personas con habilidades en escritura, matemáticas, programación o incluso inglés. Por ejemplo, hay plataformas que pagan $25 USD por hora por realizar estas actividades: Lo probé personalmente antes de recomendarlo. Hoy en día, el que no trabaja es porque no quiere.
¿Qué es ADAN? Estoy trabajando en un proyecto llamado ADAN (Autonomous Developer Automation Network), una IA diseñada para revolucionar la forma en que creamos tecnología. ADAN permitirá que cualquier persona, sin necesidad de saber programar, pueda interactuar en lenguaje común y desarrollar software, sitios web o aplicaciones a través de un chat en lenguaje 100 % común. Aunque ya existen herramientas similares, como BOLT, estas tienen limitaciones técnicas. ADAN busca superar esas barreras y ofrecer soluciones avanzadas para democratizar el acceso al desarrollo tecnológico. Si te interesa este tema y deseas discutirlo, no dudes en escribirme al correo: hernan.restrepo@tradehub.bz.
Reflexión sobre el pasado y el presente. Hace muchos años, en mi querida Valledupar, no teníamos internet, computadoras ni celulares. Había solo una pequeña biblioteca con pocos libros, y esa era nuestra fuente principal de información. Hoy en día, tenemos videos, libros, música y herramientas como la IA al alcance de nuestras manos. Nunca en la historia de la humanidad ninguna generación ha tenido tanto acceso a la información y es tan ignorante.
La tecnología está aquí para quedarse, y depende de nosotros aprender a usarla de manera inteligente y ética. Si entendemos su potencial y la utilizamos para el bien, podremos construir un futuro mejor y más brillante para todos.
Por Hernán Restrepo