Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan
Por: Aquilino Cotes Zuleta
A mis consejeros periodísticos Tío Chiro y Tío Nan los sorprendí ayer cuando dialogaban de temas políticos con sus amigos Miguel Villazón, Carlos Quintero, Ricardo Gutiérrez Gutiérrez (entrañable amigo de Colacho Mendoza) y Álvaro Becerra, en Carrefour de Valledupar.
A continuación redacto la charla de mis consejeros: “Cuando Pambelé, nuestro primer célebre Campeón Mundial de Boxeo, se mete un tabaco de marihuana o inhala cualquier otra sustancia en polvo para sentirse mejor en este país de lagartos, envidiosos y chabacanees, los periodistas del interior y de la Costa Atlántica redactan una andanada de críticas contra ese deportista inmortal y hasta piden cárcel y condenas contra él”, dijo Tío Chiro.
“Oiga compadre, igual sucede cuando alguno de nuestros ciudadanos de estrato 0, 1 o 2 reclaman sus medicamentos ante la IPS o EPS y realizan una huelga de hambre en dichas sedes para obligar a que les entreguen sus medicinas, llaman antimotines y todas las fuerzas beligerantes del Gobierno y los meten presos”, acotó Tío Nan.
“Aja compadre, si a un ciudadano común y corriente se le ocurre reclamar airadamente en la puerta de un hospital, clínica o entidad del Estado, porque no lo dejan entrar para llevarle a un familiar un medicamento, llega la Policía, el DAS y el Ejército y lo meten preso”, reiteró Tío Chiro.
“Si usted o cualquier ciudadano del común arrienda un computador y le manda un correo electrónico al Presidente de la República o a uno de sus hijos, a un ministro o a uno de sus familiares diciéndole lo que verdaderamente se merece, enseguida contratan investigadores del exterior para que localicen al dueño del computador e identifiquen al causante de tan mayúsculo delito y hasta condenan al insolente ciudadano”, corroboró Tío Nan.
“Es que los valores se han invertido compadre. En su discurso de desmovilización en Valledupar, el exjefe paramilitar “Jorge 40” acusó y denunció que la alta sociedad colombiana y los del alto gobierno “metían” drogas, entonces ellos no son drogadictos. En cambio, cuando un ciudadano común y corriente usa drogas se convierte en un vulgar ladrón y sicario de baja monta”, denunció Tío Chiro.
“Ajá compadre, eso es verdad, a los ricos les da migraña y a los pobres dolor de cabeza. A los poderosos les da malestar estomacal y a los del pueblo pueblo les da diarrea, como si esa enfermedad no es igual para todos”, agregó Tío Nan.
“Pero oiga usted esto compadre, el Senador Rodrigo Lara agredió de manera verbal y solo le faltó pegarle a un vigilante de Corferias en Bogotá y con una simple explicación por los medios de comunicación el congresista de marras ya superó el incidente”, acotó Tío Chiro.
“Si señor, nadie ha entrevistado al vigilante ni las autoridades se han pronunciado por tan bochornoso hecho realizado por el susodicho congresista, quien sigue campante y sonante como si nada hubiese pasado”, precisó Tío Nan.
“Lo mismo sucede, compadre, con todo el proceso electoral realizado el domingo anterior. Los dueños del país, los señores Andrés Felipe Arias “Uribito”, Noemí Sanín, Pastrana, etc. tienen en aprieto a todo el sistema electoral porque no pueden esperar unos días; mientras que la suerte de los candidatos por las Negritudes, Indígenas y Voto Caribe siguen en ascuas, en la peor de las incertidumbres”, narró Tío Chiro.
“Se afirma que en este proceso de la consulta conservadora tienen las manos metidas los del alto gobierno que busca atajar o ayudar a alguien y por tal razón ellos mismos han creado el embrollo”, denunció Tío Nan.
“Nos toca recordarle a los ciudadanos que los del gobierno tratan de revivir al muerto del uribismo, como si sobre la faz de la tierra no hubiese a quién más para elegir”, concluyó Tío Chiro, hasta la próxima semana.
tiochiro@hotmail.com