En 2003, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 11 de diciembre Día Internacional de las Montañas.
La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), es la encargada como agencia principal de las Naciones Unidas para la coordinación de las actividades correspondientes.
Las montañas son uno de los accidentes geográficos más importantes de la superficie terrestre, donde interactúan muchos factores, que repercuten en mayor o menor grado sobre el ambiente y el hombre, constituyendo uno de los ecosistemas más complejos que existen.
Gracias al aislamiento e inaccesibilidad de algunas zonas, y a las duras condiciones climáticas, se pueden encontrar especies muy valiosas ya desaparecidas en otros hábitats.
Este año, la celebración se centra en dar a conocer y resaltar la importancia de las culturas y las tradiciones que albergan las montañas. Son lugares de culto religioso, peregrinaciones y rituales.
Los conceptos de tradición, cultura y espiritualidad están intrínsecamente vinculados con los medios de vida de las gentes de las montañas. Sus estilos de vida tradicionales determinan sus formas de subsistencia.