Este jueves 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y en el marco de esta celebración las diferentes universidades de la ciudad de Valledupar, a través de sus programas de Enfermería y Psicología, realizarán actividades sobre la importancia de la salud mental en los niños, adolescentes, jóvenes, adultos mayores y en el entorno laboral.
Lo anterior debido a que en la ciudad se deben implementar más rutas que le apunten a la prevención de enfermedades mentales. De acuerdo con el último reporte del Sistema de Vigilancia en Salud Pública, Sivigila, en Valledupar en lo corrido del año se han registrado 244 casos de intentos de autoeliminación, la cifra más alta del departamento del Cesar.
De esta cifra 148 corresponden a mujeres, 60,7 %; hombres (96), 39,3 % y adultos mayores de 65 años (3), 1,2%. Siendo el 60, 5 % de estrato socioeconómico 1; el 28,4 % de estrato 2 y el 9,5 % de estrato 3. Al respecto, Dairis Campo, docente de la asignatura Enfermería en Salud Mental y Psiquiatría de la Universidad Popular del Cesar, UPC, comentó que el panorama de la salud mental en la ciudad “no es muy bueno”.
“Desde el programa de Enfermería hemos tenido encuentros con la Dirección de Convivencia Social y Salud Mental que hace parte del Plan de Salud Pública y lo que uno ve son muchas actividades encaminadas a corregir, en vez de prevenir o mantener. A la larga son muchos pañitos de agua tibia y eso se evidencia en las cifras de intentos de autoeliminación, los consumados y las conductas autoinfligidas y autodestructivas”, explicó Campo.
El colegio y la familia
De acuerdo con Mauricio Núñez, psicólogo clínico y docente del programa de Psicología de la UPC, un alto porcentaje de instituciones educativas de Valledupar y familias no le está brindando a los niños, adolescentes y jóvenes una formación, educación y alfabetización en salud mental.
“Si en el hogar no se les enseña a los niños, adolescentes y jóvenes a reconocer sus emociones y a cómo gestionarlas se producen las enfermedades mentales y los conflictos emocionales. La autoeliminación se presenta como una alternativa para solucionar un problema porque la persona no tiene las herramientas ni el aprendizaje para solucionarlo”, argumentó Núñez.
Agregó que varios colegios no tienen en su plan de educación estrategias enfocadas en la salud mental y prácticas de bienestar que le ayude a los estudiantes a manejar las situaciones que se les presentan. “En muchos colegios solo hay un psicoorientador o un psicólogo para atender 1.000 o 2.000 niños lo que tiene como consecuencia que no haya un buen seguimiento del desarrollo psicosocial de los estudiantes”.
Higiene mental
Según un reporte del Sivigila, en el Cesar el comportamiento de conductas autodestructivas en los últimos cuatro años pasó de 551 casos de intentos de autoeliminación reportados en el 2020, a 620 casos en el 2023, representando un aumento del 12,52 %.
A corte de junio del presente año se registraron 30 casos de autoeliminación y 326 casos de intentos, de los cuales 130 son jóvenes entre los 15 y 24 años, siendo Valledupar la ciudad con mayor número de reportes. Lo anterior expone la crítica situación en bienestar mental que hay en el departamento y que afecta a adolescentes, jóvenes y adultos mayores, población que ha despertado la alerta por los recientes casos de autoeliminación.
En ese sentido, Dairis Campo, docente de la asignatura Enfermería en Salud Mental y Psiquiatría de la Universidad Popular del Cesar, UPC, precisó que la salud mental no solo tiene que ver con la autoeliminación, sino que también se refiere a un grupo de conductas y hábitos que influyen en el desarrollo de la personalidad de una persona y como esta vive.
“La higiene mental es más antigua que la salud mental. Este término se refiere a esos espacios que tomamos como seres humanos para descansar la mente como por ejemplo la higiene del sueño, tomar un momento en la mañana para respirar, realizar ejercicios de visualización o recordar las cosas positivas del día. La falta de esos momentos afecta la salud mental”, explicó Campo.