Gueiris Dayana Severiche Osorio, es una joven a quien no le importaron las dificultades para aprender. Nació en un hogar humilde, su padre es campesino y su mamá ama de casa, pero nada de eso fue impedimento para no ser el mejor Icfes de Villa Germania, un corregimiento al sur de Valledupar, una población que carece de buenas vías de acceso y una infraestructura educativa de lujo.
La joven de 16 años tiene buena memoria, porque recuerda muy bien cómo hizo para alcanzar el logro que ahora será premiado por el Gobierno Nacional a través del programa ‘Ser Pilo Paga’ con una beca o crédito condonable para estudiar en una de las 39 universidad del país acreditadas como de alta calidad.
Su historia y menos la de su pueblo es fácil. De Valledupar fueron desplazados más de 38.00 personas, especialmente de la zona rural como Mariangola, Villa Germania y Caracolí, zona que era controlada por el jefe paramilitar David Hernández Rojas, alias 39. Uno de los hechos más recordados en Villa Germania fue el asesinato de Hilmer Alfonso Mindiola Mendoza, quien fue sacado de la casa por unos 40 hombres que vestían prendas de uso privativo del Ejército, según información de las autoridades. Mindiola Mendoza, de 27 años, estaba visitando a su papá, Dairo Enrique Mindiola Camargo, quien resultó ileso en esta acción criminal.
Pero eso página ya pasó, ahora hay una nueva que escribir y se trata de la virtud de una adolescente como Gueiris Dayana que sacó 325 puntos en las recientes pruebas Saber que aplica el Ministerio de Educación a través el Icfes, ubicándola entre los 126 estudiantes beneficiaros de ‘Ser Pilo Paga’ en la capital del Cesar.
“Ese día no había luz en el pueblo, el profesor Rafael Orozco llegó a mi casa y dijo que un estudiante de Villa Germania se había ganado la beca, pero no sabíamos quién era; en ese instante llegó la luz y el profesor se fue para el colegio ( el único sitio con internet) y comprobó que era yo”, relató Gueiris a EL PILÓN.
Asegura que logró el puntaje gracias a las lecturas y concentración que tuvo en la prueba. En matemáticas sacó 77, pero no se inclinará por una carrera como ingeniería, lo hará por la medicina que es su pasión.
Vive con sus padres, Gladis Osorio y Pedro Severiche, tiene tres hermanos y subsisten de una tienda en Villa Germania.
“Quiero estudiar medicina, me inscribí en la Universidad del Norte y en la Universidad Autónoma del Caribe en Bucaramanga. Me gustaría mucho salvar vidas, pensaba estudiar una ingeniería pero me quedo con la medicina”.
Agradece al gobierno, en especial al presidente Juan Manuel Santos, por abrir el programa ‘Ser Pilo Paga’ porque sus padres no tenían como costearle una carrera universitaria.
“Me di cuenta que todo es lo que uno se proponga lo puede conseguir, yo en ese corregimiento tan lejos y fui capaz, entonces todos podemos hacerlo. Hay mucha gente que quiere estudiar y no puede por falta de recursos, este es un programa que de verdad abre las puertas y el Gobierno debería tener muchos proyectos más”, dijo la estudiante de último grado de bachillerato de la Institución Educativa Agropecuaria de Villa Germania.
Este año el 7 % de todos los que presentaron las pruebas tuvo un puntaje de 318, superior en ocho puntos con relación al 2014, por tal motivo el punto de corte de las pruebas Saber 11 para ingresar a los ‘Pilos’ fue de 318 y no de 310.
Para la segunda versión de ‘Ser Pilo Paga’ el Gobierno otorgará 11.000 créditos becas, de los que 1.000 serán para jóvenes que quieran convertirse en maestros.
¿Cómo les fue a los primeros ‘pilos’?
En octubre de 2014 el gobierno lanzó el programa ‘Ser Pilo Paga’, que becó a los mejores 10.080 bachilleres de bajos recursos. De acuerdo con el balance entregado por el presidente tan solo el 0,17 % desertó. “Una cifra muy inferior a la tasa de deserción general de la educación superior que está cercana al 10 %”, explicó Santos. Además, resaltó los buenos resultados académicos que obtuvieron.
La ministra Gina Parody reveló en agosto pasado que el 80 % obtuvo un promedio superior a 3,5 en el primer semestre, y solo el dos por ciento por debajo de 3.
Además, más de nueve mil becarios ya renovaron su crédito condonable con el Icetex y están listos para entrar a su segundo semestre.
“Me di cuenta que todo es lo que uno se proponga, ese corregimiento tan lejos y fui capaz, entonces todos podemos hacerlo”.
Por Carlos Mario Jiménez
carlos.jimenez@elpilon.com.co