Juan José Cárcamo Polo es un comerciante oriundo de Cartagena y como muchos otros vendedores que ven en el Festival Vallenato la oportunidad de incrementar las ventas de sus productos, llegó hace unos días a Valledupar para aprovechar esta época en la que se desarrolla la fiesta más importante de la ciudad.
Cárcamo, de 59 años, fabrica guacharacas que vende entre los $5.000 y los $30.000, con lo que logra obtener ganancias promedio entre los $800.000 y el $1’000.000 durante los días de festival, al cual acude hace doce años.
“Siempre me ha ido bien, vamos a ver este año qué tal”, expresó Cárcamo, para quien lo más especial de estos días es que sus hijos compiten en las categorías de acordeonero aficionado y profesional.
Se trata de Julio César y José Luis Cárcamo, quienes este año disputan la corona de rey Aficionado, mientras Ángel Cárcamo hace lo propio en la categoría de Acordeonero Profesional.
Precisamente, este último obtuvo el tercer puesto en la categoría que hoy compiten sus hermanos.
Así pues, no solo el comercio mueve al padre de los Cárcamo para llegar en cada Festival Vallenato a la ciudad con la máxima fiesta de acordeones.