Hay gente que motiva, que transmite y otras que inspiran. Estos tres aspectos confluyen en el carácter de la periodista Ana María Ferrer, quien desde el 1 de noviembre de 2014, que asumió con ímpetu la dirección del diario EL PILÓN, le dio un viraje al medio, rechazando cualquier presión de personas, partidos políticos, gobernantes y grupos de intereses económicos, religiosos, raciales, étnicos e ideológicos.
Con ella, EL PILÓN se atrevió a publicar temas que antes eran vedados en los medios locales y marcó en sus políticas editoriales una vocación de medio regional defensor del pluralismo, de la tolerancia, del derecho de las minorías, de la libertad individual y del libre desarrollo empresarial.
Durante los tres años y medio que estuvo en la dirección del diario, habló sin miedo. Aunque antes ya había mostrado su talante como jefe de redacción y reportera; aquí comenzó su vida periodística hace más de 20 años, recién egresada de la Universidad Autónoma del Caribe. Ahora asume nuevos retos profesionales, en los que le deseamos muchos éxitos, teniendo en cuenta su calidad humana y profesional.
La Junta Directiva, personal administrativo y equipo de redacción de EL PILÓN reconocen sus aportes para que este hoy sea uno de los medios de comunicación más influyentes del departamento del Cesar y con mayor credibilidad.
Es una mujer ganadora, que en noviembre de 2016 recibió el reconocimiento ‘Orlando Sierra’ al coraje de un periodista, que entrega el Premio de Periodismo Regional Semana – Grupo Argos 2016 “El país contado desde las regiones”, que reconoce y estimula la calidad periodística de quienes ejercen esta labor en el territorio nacional.
A ese reconocimiento se sumó otro el pasado mes de febrero al ser incluida entre las 100 Mujeres Transformadoras del país, listado que publicó el portal web La Silla Vacía, que exalta su lucha por la independencia del periodismo en el Cesar. Se trata de un grupo de mujeres menores de 50 años que han transformado al país desde sus rincones y son símbolo de muchas otras que cambian a Colombia para bien.
En su trasegar profesional no solo se ha dedicado a darle mejores elementos de juicio a la audiencia de EL PILÓN, en el diario impreso y el portal web, sino que ha apoyado a sus colegas afectados por las actuaciones que atentan contra el desarrollo del ejercicio periodístico, como corresponsal de la Fundación para la Libertad de Prensa, FLIP.
“Las malas personas no pueden ser buenos periodistas”, concluye el escritor y periodista Ryszard Kapuscinski, maestro de este oficio, por lo que con las características antes mencionadas queda en evidencia el tipo de persona que es Ana María Ferrer Arroyo.
Y qué mejor coyuntura para reconocer su trayectoria que hoy, Día Mundial de la Libertad de Prensa, que este año tiene como lema “Los frenos y contrapesos al poder: medios de comunicación, justicia y estado de derecho”.
El reto en EL PILÓN, ahora sin este baluarte del periodismo regional en su dirección, es emular esos derroteros que ella impuso, de los que impregnó a los periodistas jóvenes de nuestra redacción.