En las últimas horas, la Gobernación del Cesar informó que tramitó ante el Ministerio de Salud y Protección Social un giro que supera los $22 mil millones para pagar a los hospitales del Cesar la atención prestada a los migrantes. En ese sentido, el Ministerio hizo oficial la asignación de los recursos destinados exclusivamente al saneamiento de la facturación auditada y conciliada, a través de la Resolución 00001897 del 24 de noviembre de 2021.
Según señaló la secretaria de Salud departamental, Erika Maestre, de los $22.000 millones, $11.000 millones fueron destinados para pagar una parte de la cartera que se tenía con el Rosario Pumarejo, HRPL: “Con esfuerzo, dedicación y mucho trabajo, en dos meses el gobierno del Cesar logró depurar la cartera por población migrante y los convenios celebrados con centros asistenciales, reportando al Ministerio de Salud las cuentas por pagar y las glosas, que fueron reconocidas por el orden nacional y que benefician a 26 hospitales, entre ellos al Rosario Pumarejo de López. Con más de 70 auditores y verificadores se depuró la cartera y los recursos ya reposan en las cuentas maestras de los centros asistenciales en salud”.
No obstante, hay diferencias en torno al valor total de la deuda que se tiene con el HRPL por la atención a migrantes. Según miembros de los sindicatos y diputados del Cesar que han estado analizando con lupa la crisis financiera del hospital, la cartera por este servicio superaría los $40.000 millones a corte de junio de 2021, no obstante, la secretaria de Salud manifestó que el valor radicado inicialmente corresponde a $27.996 millones, pero, después de algunas auditorías el valor sería de $16.000 millones.
De acuerdo a la funcionaria, la totalidad de la cartera del hospital no se ha depurado: “El Ministerio nos solicitó la cartera que estaba conciliada, auditada y reconocida de todas las ESE del departamento a corte de 30 de abril del 2020. En ese momento nosotros teníamos auditados los $11.600 millones del Rosario Pumarejo y fue lo que certificamos, pero la cartera del hospital a corte del 30 de noviembre asciende a $16.000 millones. Todavía tenemos un valor restante por el servicio a la población migrante”.
A su turno, la gerente de la ESE, Leidis Manjarrez, señaló: “Este pago es un reconocimiento a un servicio que prestamos a la población migrante. Destacamos el trabajo articulado con la Secretaría de Salud que nos permitió, en un tiempo récord, depurar la cartera y cumplir con nuestras obligaciones administrativas”.
Otros hospitales del departamento del Cesar también recibieron el pago de sus servicios por atención a población migrante, recursos que fueron distribuidos de la siguiente manera: José Padilla Villafañe de Aguachica recibió un giro por más de $1.164 millones; Jorge Isaac Rincón Torres de La Jagua de Ibirico, $750 millones; el Hospital regional San Andrés de Chiriguaná, $465 millones; el Hospital Agustín Codazzi, $396 millones; Hospital El Socorro de San Diego, $154 millones; el San José de Becerril, $207 millones; el Hernando Quintero Blanco de El Paso, $332 millones, entre otros.
HAY QUE GESTIONAR CONTRATOS CON LAS EPS
No es un secreto que las Empresas Prestadoras de Servicios, EPS, han ido trasladando a sus usuarios al sector privado, aun cuando tienen la obligación de contratar el 60 % con el sector público para garantizar que los hospitales no desaparezcan. Es por eso que una de las estrategias que se debe implementar en el Rosario Pumarejo es la gestión de nuevos contratos con las EPS.
Ante esto, la secretaria de Salud del departamento puntualizó: “Seguimos trabajando en la recuperación del Hospital Rosario Pumarejo de López, y avanzamos en la gestión de nuevos contratos con las EPS para fortalecer financieramente al centro asistencial, y seguir en esta cruzada del gobierno departamental para trabajar unidos en salvar al hospital”.
Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN