Cerca de 300.000 millones de pesos ‘se movieron’ en el marco del Festival de la Leyenda Vallenata 2017, dinamizando significativamente la economía vallenata. Así lo reveló la Cámara de Comercio de Valledupar, al presentar el balance comercial y turístico de la máxima festividad folclórica del Cesar.
“Por ser una fiesta de alcance nacional e internacional su impacto trasciende las fronteras de las empresas, lo que dificulta conocer la cuantía de los ingresos y egresos que el Festival genera y cuánto termina en otras regiones del país. En este grupo de empresas se encuentran las líneas aéreas, empresas fabricantes y distribuidoras de licores, bebidas no alcohólicas y cigarrillos, entre otras”, manifestó el presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Valledupar, José Luis Urón Márquez.
Otra fuente de gastos asociados al Festival, de acuerdo con el líder gremial, es la inversión realizada en artistas locales, nacionales e internacionales así como los servicios logísticos y alquiler de equipos contratados para montar los espectáculos en distintos escenarios de la ciudad que generan ingresos de alta cuantía en boletería y patrocinios de las marcas de consumo masivo y también de derechos de transmisión de eventos por radio y televisión. También los relacionados con los preparativos de los distintos eventos, principalmente el desfile de Piloneras y la inversión asociada a los atuendos, música, ensayos y demás apoyos necesarios para participar.
Procedencia de turistas
La región Caribe (Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Sucre) encabeza las cifras de turistas asistentes al Festival con 49 %, seguidos de los turistas procedentes de los departamentos que conforman la región Centro Oriente (Boyacá, Cundinamarca, Norte de Santander, Santander y Bogotá Distrito Capital) con 28 %. También se evidencia un 9 % que proviene del exterior (de Venezuela, Perú, Puerto Rico, México, España, Canadá y Argentina, entre otras regiones)
“Aquí se evidencia que los visitantes están concentradas en la región Caribe; falta vender el evento en todo el territorio colombiano para que vengan visitantes de otras regiones del país en mayor proporción”, enfatizó Urón Márquez.
Visitantes
Los distintos entes gubernamentales encargados del control de llegada y salida de personas a Valledupar reportaron que la ciudad recibió aproximadamente 148.330 visitantes. Aproximadamente 104.100 lo hicieron en carro particular, 37.054 ingresaron en buses intermunicipales y 7.176 entraron en avión.
Hospedaje
En el informe presentado por la Cámara de Comercio de Valledupar se refleja que el 70 % de los turistas se hospedó en casa de familiares o amigos, mientras que el 30 % pagó por su estadía en la ciudad haciendo uso de hoteles (17 %), casas o apartamentos alquilados (10 %) y hostales (2 %).
El 96,5 % de los turistas encuestados contestaron afirmativamente al ser preguntados si visitarían la ciudad en una época distinta al Festival, “por lo cual el sector turístico de la ciudad y la región debe prepararse para brindarle una experiencia satisfactoria a los turistas en futuras oportunidades”, acotó el Presidente de la Cámara de Comercio de Valledupar. Igualmente, el 99 % recomendaría a amigos y familiares asistir al Festival de la Leyenda Vallenata.
Sitios más visitados
En el comparativo entre turistas y residentes se observa que ambos prefieren los mismos sitios turísticos, siendo los más emblemáticos de la ciudad el río Guatapurí y la Plaza Alfonso López.
“Tomando en cuenta estos resultados se hace necesaria una evaluación interinstitucional e integral de las bondades y falencias de ambos lugares, y muy particularmente sobre el uso del espacio público en la plaza Alfonso López, dada su importancia como escenario del concurso de acordeonero profesional para elegir al Rey Vallenato”, anotó Urón Márquez.
Balance comercial
Los vendedores que ejercieron esta actividad en el Festival lo hicieron de manera ambulante y estacionaria (considerando a los vendedores estacionarios como vendedores informales con puntos de ventas fijos); el 58 % fue vendedor informal estacionario y el 42 % ambulante.
El 51 % de los vendedores ambulantes y estacionarios viene de fuera de Valledupar. Estos vienen principalmente de Barranquilla, además de Cartagena, Riohacha, Sincelejo, Santa Marta, es decir, de la región caribe, por la cercanía y facilidad que hay de traer mercancía a la ciudad; vendedores de otros países como Venezuela y Argentina también ven oportunidades económicas en el Festival.
“El Festival Vallenato trae consigo una gran oportunidad comercial y turística para la ciudad, que es aprovechada por un gran número de vendedores. Pero esta actividad es realizada de manera informal, ya que solamente el 13 % de los vendedores paga por permisos para ejercer la actividad, haciendo un cálculo entre los vendedores que pagaron a la Alcaldía Municipal de Valledupar, que fueron 303, lo que nos muestra un porcentaje de informalidad preocupantemente alto”, precisó el líder gremial.
Las bebidas fueron los productos más vendidos por vendedores ambulantes y estacionarios (38 %), seguidos de artesanías y accesorios (21 %) y alimentos preparados o sin preparar (15 %). Los sombreros, ropa y ponchos ocupan el cuarto lugar entre los productos más ofrecidos, con el 14 %.
Municipio asegura que corregirá fallas
Al respecto, el líder del programa de Ciudades Sostenibles, Franklin Daza Suárez, manifestó que “la administración ha entendido que la dinámica que está presentando el municipio indica que la actividad turística es una oportunidad para la ciudad, para mejorar los índices de ocupación, de empleo y la dinámica económica. El reto grande es mejorar muchos servicios como: el transporte hacia los corregimientos, los precios en muchos servicios como alimentación y hospedaje. Hay que llegar a unos consensos con los prestadores de servicios turísticos para definir una política de atención al cliente que permita que esta percepción se vaya eliminando porque si el destino turístico es apetecido, hay que corresponder con políticas públicas que permitan al turista sentir mayor satisfacción y tranquilidad a la hora de decidir venirse para Valledupar”.
Entre las medidas que plantea para evitar el sobrecosto en algunos servicios, del que se quejan propios y visitantes, es poner en funcionamiento la Oficina de Control de Precios y Medidas, que anteriormente existía y estaba adscrita a la Secretaría de Gobierno. Frente al control del espacio público, asegura que es necesario tener mayor presencia de la administración y una regulación establecida. “No solo es que haya lo represivo, sino que previamente al Festival haya un decreto o acto administrativo que les permita saber cuáles son las reglas del juego a los que quieren ejercer esa función de venta ambulante o estacionaria. Es una necesidad no solo en Festival, sino en todas las épocas del año”, anotó.
Por su parte, el líder de Emprendimiento Municipal, Víctor Montaño, dijo que “esta información que nos ofrece la Cámara de Comercio es fundamental para todos los procesos de planeación y prospectiva de mejora de la ciudad.
Estamos muy de acuerdo en que la organización del uso del espacio público y la lucha contra la informalidad es uno de los aspectos en que debemos avanzar, no solo para el Festival, sino en todos los eventos de la ciudad para promocionar su potencial turístico. El río Guatapurí es una de nuestras mayores preocupaciones de la Alcaldía; se va a realizar un piloto de reorganización de la actividad económica que se realiza en el balneario Hurtado y en playa Maravilla, que implica una asignación de espacios, un mínimo de calidad de la infraestructura y un control de precios para mejorar la realidad que hoy en día es caótica y deficiente”.
Entre tanto, el secretario de Tránsito Municipal, Víctor Arismendy, expresó que en la línea que colocaron al servicio en la época de Festival para atender quejas de movilidad solo recibieron seis quejas acerca de las altas tarifas de los taxistas. Para contrarrestar esta situación, el funcionario anunció que estará oficiando a las empresas de este servicio público con los datos aportados por los usuarios para que se les sancione.
Voz de comerciantes
¿A usted le fue bien o mal en el Festival?
Eliana Martínez, vendedor de bolsos
“Regular. El primer día fue movido, pero los últimos tres días fueron bastante quietos. Tal vez se debió a la restricción de motos y al hecho que cerraran con vallas parte de la zona que bordea a la plaza Alfonso López. Entraban muchos turistas, pero a ver y agarrar fresco del aire acondicionado, más no a comprar”.
Zoraida Lúquez, estilista
“Bien. A mi negocio llegó una cantidad considerable de público, puesto que querían lucir bien presentados; más que todo llegó gente a hacerse uñas, hice poco cepillados, puesto que la mayoría usaba sombreros para refugiarse del calor”.
Fabián Quintero, vendedor de comidas
“Excelente, porque estamos en la zona de influencia de la plaza, donde llega mucho turista que le parece más cómodo comer cerca del lugar donde se realiza la final del concurso de Acordeón Profesional. Todos los días del Festival nuestro restaurante estuvo lleno de visitantes”.
Darío Ariza, administrador de bar-restaurante
“Bien en mi negocio, porque venía mucha gente sobre todo a comer. Pero si hay que hablar de la organización del Festival me pareció pésimo como estaba la plaza, que se desdibujaba con la cantidad de vendedores ambulantes con sombrillas y por las carpas de las cervecerías; parecía un festival de pueblito, más que de una ciudad capital”.
Osnaider Polo, vendedor de artesanías
“Bien, gracias a Dios. El flujo de personal fue alto en Calle Grande. Lo que más me solicitaron fueron sombreros vueltiaos”.
Carmen Guevara, vendedor de artesanías
“Bien, porque vendí gran parte de mi mercancía. Lo que más compraron fue: sombreros, mochilas y recuerditos para llevar a sus lugares de origen. Lo que nos afectó un poco fue la cantidad de vendedores ambulantes, puesto que se llevan a algunos clientes que podrían ser de nosotros; ellos no pagan impuestos ni alquiler del local, mientras que nosotros sí”.