El tradicional discurso que realizan los presidentes de los Estados Unidos durante el primer mes del año genera muchas expectativas en la comunidad internacional y primordialmente a los americanos, debido a la importancia que este reviste para la proyección de la política de Estado, la cual se llevará a cabo.
Este discurso enero- 2018, además está acompañado de ansiedad con respecto a las excentricidades del presidente Trump, las relaciones divididas con la comunidad internacional, sus comentarios y expresiones mordaces con los llamados Drimers o los inmigrantes que constituyen una gran parte de la Nación de América.
En plena audiencia en el Congreso de los Estados Unidos se pudo observar algunas singularidades a desatacar, tales como la presencia de personajes que despertaron sentimientos y sensaciones distintas a las normalmente percibidas en este tipo de discursos, historias como las de la familia del estudiante que fue capturado en Korea del Norte, sentenciado a 15 años de trabajo forzoso y quien murió tras vivir una vida llena de maltratos finalmente en los Estados Unidos. Este tipo de relatos incluidos en el discurso del Presidente de los Estados Unidos, como la historia de un valiente Bombero que salvó a una mujer embarazada adicta a la heroína, parecían ser un distractor en el discurso de fortaleza del presidente Trump, cuyo porcentaje de aceptación de la audiencia estadounidense alcanzó un 75 % y tan solo un 25 % de rechazo.
Exhortó al Congreso de la Republica para fortalecer el arsenal militar y nuclear de América para defender su soberanía de las amenazas constantes de China y de los norcoreanos, que a menudo lanzan insultos en “contra del digno pueblo de América”.
Mantener el poder es la forma más segura de proteger nuestra Nación, reconoce sus enemigos y los cataloga de terroristas ilegales.
Como cualquier otro discurso de Gobierno no podía obviar sus resultados en materia de desempleo, el cual menciona es el más bajo de los últimos años, solo la industria alcanzó a generar 200.000 empleos en esa área de producción, algo muy importante para los americanos, la baja en impuestos, logró importantes recortes fiscales para los medianos productores del país.
El llamado que hace Trump a la unión del Estado busca fortalecer a los Estados Unidos y recuperar su imagen de potencia, a través de la generación de empleos y lucha contra la ilegalidad, aunque su discurso no estuvo dirigido a las políticas de migración, considero que su omisión es parte de su estrategia para mermar los ánimos e imagen de su gobierno, no obstante la expresión “our people are strong”, la forma como menciona nuestra gente es fuerte, refleja expresión de exclusión frente a la población inmigrante que aunque tienen vínculos muy fuertes con este país, finalmente son errantes; sin lugar a duda, se quiso mostrar un poco más humano y trasmitir una imagen de incluyente distinta a las demás ocasiones e intervenciones que más han brillado por su extravagancia y discriminación. Esperemos el cumplimiento y desarrollo de esta política de unión y que tanta participación comercial tendrán los países de América Latina, y cooperación contra la ilegalidad, ya que en su discurso poco habló de su comunidad vecina y centró más su discurso en los objetivos de la gran nación de América, obviando su naturaleza de financiador y facilitador de la política exterior en este y demás continentes del mundo.