Sobre la calle 18 no saben si culpar a la Concesión Alumbrado Público o a Electricaribe por las continuas fluctuaciones en el alumbrado público que, además, me dijeron que es prácticamente nula por la frondosidad de los árboles sembrados en el sector.
Encontré al señor Aníbal Rodríguez leyendo en la puerta de su casa, y con todo gusto me atendió. Lo primero que me dijo es que “el alumbrado es malo y el montón de árboles tapa todo. Algunos vecinos los podan, otro no. Hay postes que apartaron de los árboles y sí alumbran la calle, pero otros están muy metidos por el árbol y no se ve la luz”.
La misma situación me relató Jorge Herrera, quien afirmó que “hay un problema con esos focos, a cada ratico se les va la luz porque al rato de estar prendidos, se apagan. Eso pasa casi todas las noches y nos toca todos prender los focos en las terrazas”.
El señor Javier Carrillo me dijo que “las lámparas están fallando y no prenden como tienen que prender, pero no alumbra también por la falta de poda de los árboles. Otra cosa es que la gente se roba los bombillos”.
Teniendo en cuenta esta queja, fui donde a Johan Arango, gerente de Electricaribe, quien me afirmó que los problemas de fluctuación en el alumbrado público los maneja directamente la Concesión Alumbrado Público, ya que ésta maneja sus propios transformadores. Entonces busqué a Jaison Penso, gerente de la citada concesión, pero no me contestó su celular, sin embargo les prometo una respuesta a este problema en el barrio Dangond.
Según la comunidad, las fluctuaciones de energía son constantes, por lo que siempre deben encender bombillos en las terrazas para que las calles no se vean tan oscuras.