Crear en la capital del Cesar, la Agencia de Promoción de la Inversión, Pro-Valledupar, es una de las recomendaciones que hizo el director de Análisis Económico de Fedesarrollo, Jhonnatan Malagón, para proyectar esta ciudad en materia económica en la Región Caribe.
La iniciativa, explicó Malagón, contará con la asesoría de agencias de promoción establecidas en Colombia, porque la idea es vender a Valledupar como destino de inversión, tratándose de una ciudad joven con gente bien preparada, con una localización geográfica privilegiada y además, está en un país con muchísima estabilidad macro-económica.
“Es necesario venderla a los inversionistas, pero no como una oficina de promoción en Bogotá, hablo de una oficina de promoción comercial de escala mundial, porque para la ciudad, es muy importante atraer inversiones”, acotó.
Agregó que, aunque Valledupar es un municipio con muchas potencialidades, que ha tenido buen crecimiento económico, quizás uno de los mejores en la Región Caribe, que la reducción en la tasa de desempleo es la mejor de esta zona y que ha sido el que mayor aporte ha hecho en los últimos diez años, pero los niveles de pobreza son relativamente similares.
Argumentó además, que esta capital no ha mejorado en términos de equidad, es así que, la desigualdad sigue siendo uno los problemas rampantes en la región, lo que se podría superar con la creación de la Agencia de Promoción de la Inversión.
Algunas cosas que preocupa, según Jhonnatan Malagón, es el sistema económico de Valledupar en los últimos diez años, relacionado con el nivel de informalidad laboral, porque si bien es cierto que la tasa de desempleo en la ciudad es relativamente baja, los niveles de sub-empleos son altísimos comparados con la región Caribe, en especial con los del municipio de Riohacha, La Guajira.
En otras palabras, “se genera empleo en la capital del Cesar, pero ese empleo, es mala calidad. Nosotros, desde Fedesarrollo, observamos con mucha preocupación la ‘reprimarización’ de la economía, es decir, la ganancia de la participación de la explotación minera, a costa de la participación del sector agropecuario y de la industria.
Lo vemos así, porque estos dos últimos renglones de la economía, son los que están en capacidad de generar empleos sostenibles en el mediano plazo y empleos formales”, dijo el director de análisis económico de Fedesarrollo.
Consideró que, cree que la gran apuesta de Valledupar hacia el futuro, es la de repotenciar sus esquemas en su aparato comercial, agrícola e industrial, con el fin de diversificar los empleos del sector minero e irrigarlos a otros sectores de la economía.