Según reportes oficiales del SIVIGILA, “en el Cesar el comportamiento de la conducta suicida en los últimos cuatro años pasó de 551 casos de intentos de suicidios reportados en el 2020 a 620 casos en el 2023, representando un aumento del 12,52 %”. En el 2024 se conocieron más 30 de casos de suicidios y otros más de 320 de intentos, “de los cuales 130 son jóvenes entre los 15 y 24 años, relacionando como factores desencadenantes los problemas de pareja y como factor de riesgo las ideas suicidas y trastornos mentales como la depresión”.
Traemos a colación estas cifras en razón a que este 13 de enero se conmemora el Día Mundial de la Depresión, una coyuntura para abordar los aspectos más relevantes de la salud mental de la gente, una de las principales causas de suicidio en nuestra región.
Sin embargo, las cifras del Cesar no son nada comparables con las que maneja la Organización Mundial de la Salud, cuyo reporte señala que más de 300 millones de personas en el mundo, de una u otra manera, enfrentan o han padecido problemas de salud mental, un fenómeno que no distingue edad, género ni situación económica.
La dificultad para abordar de manera acertada los problemas de salud mental consiste principalmente en que esta enfermedad está rodeada de muchos prejuicios que impiden su atención oportuna.
En ese sentido, resulta de gran importancia, por lo menos en teoría, la estrategia iniciada a mediados del año anterior por parte de la Gobernación del Cesar, con el acompañamiento de los alcaldes, diputados del departamento, líderes comunales, docentes, estudiantes, influencers y líderes en salud,
En su momento fue llamado el ‘Pacto por el cuidado de la salud mental’, firmado de manera oficial para “asumir el compromiso de brindar herramientas que permitan a todos los ciudadanos conocer la ruta para alcanzar un estado completo de bienestar y disminuir la incidencia de eventos que afectan la salud mental”.
Ese pacto es el soporte de la estrategia denominada ‘Guardianes de vida’ que es liderada por la Secretaría de Salud Departamental, la cual fue concebida como una red de apoyo intersectorial y acompañamiento psicosocial para la prevención de riesgo de la conducta suicida.
Se espera que ese proceso se consolide en este 2025 y se logre empoderar a la comunidad frente al cuidado de la salud mental, la identificación de riesgos, el conocimiento de los derechos en salud mental “y en la activación efectiva de las rutas de atención de los problemas y trastornos mentales en los diferentes entornos sociales”, tal como se propone por parte de las autoridades oficiales del Cesar.
Es importante que la comunidad tenga conocimiento de esta red y que además puede ser parte activa de ella convirtiéndose en un guardián de vida, es decir, estar dispuesto a velar por el bienestar de su comunidad, familia, amigos y compañeros. Un guardián de vida es una persona con plena disposición para brindar apoyo, escuchar, orientar y acompañar frente a cualquier situación de crisis emocional que ponga en riesgo la salud mental de la gente de su entorno.
Invitamos a los líderes de las distintas comunidades de Valledupar a que se capaciten y se conviertan en multiplicadores de esta red de apoyo encaminada a salvar vidas.