Hace más de 20 años, la familia de César Augusto Bautista Guerrero, exfuncionario del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), busca la verdad sobre la muerte de su familiar, víctima del delito de desaparición. Fue encontrado sin vida en diciembre del 2001 en la carretera que conduce al corregimiento de Minca, exactamente a la altura del puente Aladino de la vía a Santa Marta. Esta investigación les ha obligado a pasar múltiples duras pruebas, al no callar y seguir en la búsqueda de los responsables del hecho.
“Mi hermano fue asesinado por los paramilitares y hasta el día de hoy no hemos logrado conseguir la verdad. Conocemos que fue ese grupo armado, pero desconocemos quiénes son los directamente involucrados y cuáles son los funcionarios de DAS que estarían detrás del hecho”, dijo Daniel Bautista, hermano de la víctima, quien a raíz de este hecho no ha logrado tener tranquilidad por la falta de protección y derechos de su vida, tras las frecuentes amenazas y atentados a las que él y su familia se han enfrentado.
Actualmente, Daniel tuvo que irse del país por intimidaciones e intentos de secuestro. Entre estos, recibió mensajes de textos intimidantes como advertencia que decían: “si usted considera a su familia salga de Valledupar, sino se le muere su familia por no colaborar”, “sigan preguntando lo que no deben y verán lo que les va a pasar”, cuyas notas aparentemente son procedentes del grupo armado ‘Los Pachenca’, herederos de la estructura armada paramilitar ‘Frente Resistencia Tayrona’ de las AUC posterior a su desmovilización. Y como esta amenaza, han surgido muchas otras, estando todas las acciones encaminadas en lo mismo: en no dar continuidad a la investigación y mantenerla en el silencio para que los verdaderos responsables nunca se conozcan.
“Tengo temor de volver a Colombia porque sé que voy a sufrir la misma suerte de mi hermano de tortura, desaparición, desmembramiento y homicidio”, expresó Bautista.
El pasado mes de noviembre del 2023 el padre de César Augusto hizo una solicitud para entrevistarse con Hernán Giraldo Sierra, conocido como alias de ‘El Patrón’, quien fue uno de los principales comandantes de las Autodefensas Unidas de Colombia AUC y actualmente está solicitando recobrar su libertad. A raíz de este acercamiento aumentaron las intimidaciones y la familia ha estado atemorizada.
De hecho, el pasado mes de enero de este año, la madre de la víctima fue intervenida quirúrgicamente al sufrir un atentado en Valledupar al ser tumbada de una motocicleta en horas de la noche.
A raíz de estos golpes, esta familia considera que las autoridades no han cumplido con las garantías de sus vidas y sus derechos como personas, debido a que, durante estos más de 20 años, no han parado las amenazas vías telefónicas, intimidaciones, seguimientos y “observación en horas de la noche en sus viviendas donde incluso toman fotografías”.
Desde que sucedieron los hechos, la investigación del homicidio ha sido liderada por la Fiscalía Quinta Seccional de Santa Marta, donde de momento no se ha podido determinar los responsables del hecho, pero continúa en curso debido al aporte de nuevas pruebas “que determinarán la posible la participación del Estado, debido a que los presuntos autores del crimen habrían actuado en conveniencia con personal del DAS, para la época de los hechos”.
La familia de César Augusto exige a las autoridades competentes que esta investigación sea culminada solo hasta que haya claridad de los implicados en el hecho, pues al no haber precisión del caso, pueden perder los beneficios que les ofrece la ley.