La Diócesis de Valledupar se alista para recibir la Semana Santa, su máximo líder el misionero claretiano Óscar José Vélez Isaza, quien llegó oriundo del departamento de Caldas, exactamente del corregimiento de Pensilvania, se ha encargado a través un trabajo misional, conquistar fieles en la ciudad a través de la unión, fe y esperanza.
El Obispo que se ordenó desde el 22 de agosto de 2003 en Valledupar conversó con el diario EL PILÓN acerca de diversos temas que hacen énfasis en la religión, el aborto, la paz, la política, Valledupar y por supuesto Colombia.
¿Qué es ser Obispo?
El sentido del Obispo es ser sucesor de los apóstoles, por tanto, él es el encargado de gobernar la iglesia en el territorio determinado que el papa le asigne.
El papa es a su vez el sucesor del apóstol Pedro… Nuestro señor designó a Pedro como la cabeza de todos los demás… Pedro apenas el Señor parte hacía el cielo, empieza a coordinar la iglesia y así murió siendo obispo de Roma.
El sucesor de Pedro es el Obispo de Roma, o sea el papa, entonces él es el que lo nombra a uno y uno está en comunión con él para gobernar la iglesia en cualquier territorio.
¿Cómo se establece la Diócesis en Valledupar?
La Diócesis se divide en parroquias que se van creando de acuerdo a las necesidades a medida que crece el territorio o a medida que de alguna manera se quiere atender mejor a los feligreses.
En este momento la Diócesis de Valledupar abarca el centro y gran parte del sur del Cesar, entonces es un territorio que está dividido en parroquias. En este momento son 70 parroquias y 36 centros de pastoral.
¿Después de usted quien sigue en jerarquía acá en Valledupar?
Hay lo que llaman los vicarios, es decir que hace las veces de otro. Ellos son los que me ayudan, está el vicario general que es el padre Jose Enrique Muñoz, el padre Jesús Torres que es vicario también, que es el párroco de la natividad y el padre Enrique Iceda, quien es vicario de administración. Ellos son los vicarios que me colaboran y junto a ellos están el rector del seminario y el canciller de la Diócesis que es el que me ayuda en organización, secretaría y demás.
Monseñor ¿Se podría decir que la Semana Santa es el evento más importante de la Iglesia católica?
Si, en el año es el evento más importante, porque en él se celebra la Pascua del señor, la muerte y la resurrección de Cristo y eso para nosotros es la fuente de la salvación, todo el resto de la vida del señor, de alguna manera fue la preparación para ese momento central, tanto es así, que el evangelio se describe muchas veces como un caminar hacía Jerusalén, es decir, el lugar a donde él iba a ser entregado y, asimismo, él se los anuncia así a los apóstoles.
Este es el elemento central por que gracias a la muerte y la resurrección de Cristo es que nosotros tenemos la garantía de nuestra salvación, Cristo muerto y resucitado, ahí se centra la salvación y eso lo celebramos precisamente en la Semana Santa.
¿La Semana Santa en Valledupar en que se diferencia del resto del país?
En todas partes se hace las mismas celebraciones, domingo de ramos, el Jueves Santos que se celebra la cena del Señor, el Viernes Santo que se celebra ya la muerte y el Domingo que empieza desde el Sábado por la noche la resurrección de Cristo, eso se celebra en toda iglesia de Colombia, en unas partes con mayor solemnidad y otras con mayor participación.
En algunas partes se le añade procesiones que muchas veces se remontan a la colonia por ejemplo las de Popayán, que son famosas en todo el país porque son imágenes de la colonia y esas procesiones se empezaron hacer desde la conquista de los españoles.
Año 2022 reactivación de la Semana Santa de manera presencial ¿Cuál es el llamado que hace la iglesia?
Gracias a Dios ya el covid-19 está, no vencido, pero sí controlado, y gracias a que está controlado, se están realizando las actividades y eventos que se hacían antes.
La característica nuestra es que los eventos religiosos los hacemos con mucho cuidado de las normas de seguridad. Estamos bregando hacer unas celebraciones que permitan tener un relativo distanciamiento entre la gente.
¿En esta Semana Santa hay algún énfasis especial desde el punto de vista espiritual?
Lo esencial es en todas partes iguales, la celebración de la muerte y resurrección del Señor con las celebraciones litúrgicas que empiezan el Domingo de Ramos y que terminan el Domingo de Pascuas.
En Valledupar en plena Semana Santa se celebra la fiesta del patrono popular de Valledupar que es el Ecce Homo, esto si es propio de nosotros.
Además de esto, este año la vamos a llamar Semana Santa por la vida, por el cuidado y la defensa de la vida. Nuestro Señor dice en el evangelio que –Yo he venido para que todos tengan vida y la tengan en abundancia. Visto de esa manera la vida humana es un don de Dios, es un derecho humano y por eso nosotros hemos visto muy importante la defensa y la protección de la vida humana, sobre todo cuando es la vida humana inocente e indefensa como lo es la vida de un seno materno, ni siquiera ha empezado a vivir y ya lo condenan.
Hemos querido darle ese énfasis debido fundamentalmente a la decisión de la Corte Constitucional de legalizar el aborto hasta los 6 meses de concebido una criatura en el seno materno, que se haya vuelto legal, no quiere decir que sea ético y moral.
Toda nuestra Semana Santa va a tener un énfasis por la defensa de la vida. Eso es un no rotundo al aborto, es un defender la vida.
En la Semana Santa muchos han cambiado la tradición y han mal llamado parranda santa ¿A qué cree usted que se deba esto?
Yo pienso que esto se debe a una pérdida de valores, de pronto la Semana Santa tradicionalmente era de un gran respeto por todas las celebraciones religiosas, las familias se congregaban para participar mucho.
La Semana Santa antes no era ni para parrandas ni para paseos, sino para celebrar religiosamente, obviamente a medida que se han ido perdiendo los valores, las tradiciones y demás ha venido un gran auge de la secularización, entonces ya se toma solamente como unos días libres que hay que aprovechar simplemente para el paseo.
Se debería salvaguardar también lo que es el respeto por las tradiciones religiosas.
¿Cuál es el mensaje para esas personas?
A medida que la persona se aleja de Dios, que en la familia no se transmiten los valores religiosos, a la larga no es la religión la que va a perder, es la misma familia, es el mismo ser humano.
Cuando se van perdiendo los valores no se avanza sino es una degradación y se va cayendo en la barbarie, lo mismo es la legalización del aborto, muchos lo quieren presentar como un avance, un progreso, que Colombia se esta ubicando entre los países más progresistas del mundo… Eso no es progreso, es regreso a la barbarie donde la vida ya no vale nada.
Cuando se pierden los valores humanos y religiosos es el hombre quien termina perdiendo, la iglesia tiene una misión y la seguirá cumpliendo hasta el final de los tiempos, pero es el ser humano el que perderá.
¿Por qué las personas son desobedientes?
Lo que pasa es que el demonio está actuando también, nosotros estamos haciendo lo nuestro, pero el demonio también está actuando, hay algunos medios de comunicación, la Corte Constitucional, lo que llaman creadores de opinión que están lanzando mensajes en otro sentido y le dan todo el énfasis, publicidad a cualquier hecho negativo y la gente va aprendiendo y copiando eso. Fuera de eso muchos padres no transmiten la fe en familia y lógicamente los que van son una minoría, terminaremos perdiendo toda la sociedad.
¿Cómo ve la situación actual de Valledupar en cuanto al hambre, desempleo e inseguridad?
La iglesia a nivel nacional se ha pronunciado, el tema del hambre donde obviamente hay partes que se agrava más por la carestía, el desempleo y demás.
Valledupar está entre las 4 ciudades con mayor alza en los precios, entonces las autoridades tienen que hacer leyes que contribuyan verdaderamente a buscar una mejor justicia social para disminuir todas estas situaciones tan terribles que estamos viendo.
¿Como primera autoridad de la Iglesia católica acá en Valledupar qué mensaje enviaría a las autoridades?
Lo primero es que se pongan en el pellejo de los pobres porque a veces uno puede gobernar desde el pellejo de los ricos o desde el pellejo de pronto hasta de los que lo eligieron, pero hay que ponerse en el pellejo de los pobres para buscar precisamente como normas, ayudas o soluciones a todo esto.
¿Qué piensa Monseñor de lo que está pasando en Ucrania y Rusia?
Es terrible porque bueno, como se ha dicho tanto, a uno le parece que estuviera reviviendo la segunda guerra mundial. El rechazo del mundo empezó por el santo padre, el papa dijo que estaba dispuesto hasta ir a Ucrania.
La iglesia, yo creo que la mayoría de países ha reaccionado a tiempo, no se ha involucrado en un conflicto que podría llevar a un escalamiento de una guerra mundial nuclear, pero se ha ido imponiendo de alguna manera a el conflicto en el que se ha visto involucrado estos dos países.
Yo tengo la esperanza que pronto va a terminar esta guerra después de haber dejado una gran tragedia.
Aquí en Colombia puntualmente ¿Cómo ve el proceso de paz?
El proceso de paz tiene cosas muy buenas, por eso fue que se desmovilizaron miles de guerrilleros, los números varían pero se dice que 7.000 guerrilleros se desmovilizaron y han permanecido sin volver a tomar las armas, eso ya es muy bueno porque 7.000 personas en la guerrilla, el mal que hacen es muy grande.
Muchos de ellos se han reinsertado en el trabajo social, aquí tenemos concretamente en San Jose de Oriente ese grupo, yo personalmente he ido varias veces y realmente se han conservado en la firma del tratado de paz.
Sin embargo, todos sabemos la otra parte, que no es solo por eso que ya alcancemos la paz en Colombia, hay muchos que no quisieron desmovilizarse y otros pues que siguieron con la guerra. De igual manera yo pienso que hay que seguir buscando y apostando por la paz.
A título personal ¿Se ha enamorado de la música vallenata?
Si uno no se enamora le toca irse, porque a uno le entra por todas partes, estoy muy contento, ya llevo 19 años aquí y estoy muy contento, me he adaptado muy bien al calor, sufren más los de aquí por el calor que yo.
No es que sea un fanático de la música vallenata, pero, me gusta y cuando puedo escuchar alguna, la escucho.
Por Melissa Valle
Melissavalleperiodista@gmail.com