Por: Hernán Maestre Martínez
Valledupar, Ciudad Ecológica de Colombia. Recuperemos y Conservemos las cuencas de los ríos Guatapuri y Cesar. Hagamos causa común para que el Embalse Los Besotes sea una realidad, es agua para vida en Valledupar, La Paz y San Diego.
En Colombia existen algunas regiones apartadas y con baja densidad de población, denominadas zonas no Interconectadas, cuyos habitantes han tenido un servicio de energía subsidiado por el Estado y suministrado en condiciones precarias. Por esta razón el gobierno nacional, está buscando concesionarios que utilicen energías no convencionales en dichos territorios. Como vía ejemplo vale la pena mencionar a las Empresas Publicas de Medellín (EPM) que instalaron en la Guajira, generadoras eólicas como parte del Sistema Interconectado Nacional. Proyecto piloto de investigación que no busca ni obtiene utilidades desde el punto de vista energético, su impacto sobre la oferta total de electricidad es insignificante (0,1%).
En conclusión y desde nuestra óptica, el Año Internacional de la Energía Sostenible para Todos se constituye en un compromiso con el medio rural de cara a la erradicación de la pobreza proponiendo el acceso a la energía en sus diferentes formas de uso de las comunidades aisladas como elemento fundamental para el desarrollo; demandado de la instituciones procedimientos, metas, estrategias y planes bien definidos en concordancia con el plan energético nacional y el desarrollo sostenible de los territorios, con el fin único de ordenar, proteger y conservar la base de nuestro recursos naturales para garantizar prosperidad, seguridad y estabilidad como verdaderos motores del desarrollo social y económico del país.
Finalmente queremos precisar la responsabilidad de la academia; representada en aportes determinados por la investigación, la creatividad e innovación continua, proponiendo y difundiendo tecnologías alternativas que aumenten la producción de energía suministrada por las fuentes renovables; diversificando el suministro de esta e ideando otras menos contaminantes y más eficientes, posibles y baratas, que amplíen el tributo a la oferta total; sin dejar de lado las políticas energéticas definidas por una excelente planificación, gestión y conservación de infraestructuras consumidoras de energía, que en últimas son las encargadas de impulsar el desarrollo de cualquier país.