El foro Desarrollo Energético del Cesar, realizado por el diario La República en Valledupar, en alianza con EL PILÓN, argumentó varias cosas: los presidentes de Ecopetrol y ConocoPhillips, Felipe Bayón y Alex Martínez, respectivamente, insistieron en que “no competirán con el agua potable de la comunidad”. Ambos dirigentes mineros han explicado en distintos escenarios que para el fracturamiento hidráulico no necesitan agua potable.
Esto contrasta, cabe resaltar, con el pensamiento de defensores del agua como Cordatec, asociación que asegura que el fracking está asociado a la “contaminación de las fuentes hídricas superficiales y subterráneas por metales pesados”. La discusión ha sido planteada por este medio y en ella no nos detendremos hoy.
Bayón, en un espacio de aproximadamente una hora, y con el anuncio de US $500 millones para invertir, insistió en que con los yacimientos no convencionales Colombia tendría 25 años de más crudo y hasta 75 años de gas natural ( en buena parte por la cuenca Cesar – Guajira). Y aquí es importante precisar que en el gas natural radica la transición energética, ya que es un combustible de menor emisión de gases de efecto invernadero; en Europa es más atractivo este hidrocarburo que el carbón térmico al que ha ido desplazando.
La ministra de Minas y Energía, María Fernanda Suárez, explicó en cifras lo que significan para el Gobierno los no convencionales en el Cesar, tan prometedores. Estas y otras afirmaciones se conocieron en el foro del centro de convenciones Crispín Villazón.
Un mapa mostró el potencial de energía solar en el Cesar y La Guajira, presentado por el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, demostrándolo como base de la región Caribe que tanto impulsa.
Ese tema de la energía se convertirá en tema de ese nuevo ente en formación, un instrumento de planeacion regional denominado Región Administrativa de Planificación, RAP, y en ese propósito de integración hará del Cesar y la Costa un potencial en función de la superación de la pobreza y de la construcción de las infraestructuras de conectividad física y comunicacionales. De modo que dar el paso a potenciar la actual minería, en el corto plazo; en el mediano, propiciar la transición al gas y la explotación no convencional, y en el largo plazo, el predominio de las renovables, dará pie a un progreso cabal y medio ambiental. Por eso, terminó Verano, representando a la Costa, diciendo sí al fracking pero al fracking ambiental.