Las diferencias personales que aparentemente tiene el fiscal con la juez no permitieron que la mañana del viernes se resolviera la solicitud de revocatoria de la medida de aseguramiento que hizo el gobernador del Cesar, Luis Alberto Monsalvo Gnecco, con el fin de recuperar su libertad y volver a las riendas del departamento.
En la audiencia, el fiscal once delegado ante la corte, Julio Ospina Gutiérrez, consideró que la juez Susana Quiroz Hernández no estaba actuando de manera imparcial dentro del caso, por lo que interpuso una recusación en su contra para que se apartara del proceso.
Ospina precisó que el impedimento está basado en una posible ‘enemistad grave’ entre ambos, que aparentemente se vio reflejada en la audiencia del anterior miércoles donde la togada “tuvo un trato inequitativo” a la hora de intervenir las partes sobre la medida del mandatario.
“La actitud parcial de su parte observada en el devenir de la misma me condujo a que terminada la audiencia buscara e indagara las razones que generan ese comportamiento inequitativo, encontrando que tuve a cargo un proceso en el que usted (la juez) fue denunciante”, aseveró el fiscal.
Agregó que la denuncia interpuesta en el 2013 no prosperó a favor de Quiroz, por lo que concluyó que la acción es suficiente para que la togada no atendiera el caso del gobernador en el que funge como fiscal.
Al respecto, la administradora de justicia consideró que la recusación era infundada, es decir que carecía de fundamento.
“No tenía idea, ni conocía al doctor Ospina y ni sabía que había sido en sus manos que se resolvió ese asunto”, aseguró Quiroz Gutiérrez.
Así las cosas, decidió trasladar el caso de Monsalvo a otro magistrado para que resolviera la revocatoria de medida de aseguramiento.
EL PROCESO
Eso significa que Monsalvo por ahora permanecerá privado de la libertad en su lugar de residencia. Su proceso por presuntas irregularidades en un contrato del Programa de Alimentación Escolar, PAE, en el departamento, se encuentra en etapa de juicio.
El pasado 29 de noviembre la Fiscalía Once y la defensa celebraron la audiencia preparatoria en la que ambos develaron los elementos de prueba que exhibirían en el juicio oral.
Monsalvo Gnecco está siendo juzgado por los delitos de contrato sin cumplimiento de requisitos legales y peculado, de los cuales se declaró inocente.
Además, para apartarlo de las funciones públicas lo cobijaron con medida de detención domiciliaria, la cual ha intentado tumbar en varias ocasiones.
Pero ahora la revocatoria de medida la abandera su nuevo abogado, José Luis Barceló Camacho, expresidente de la Corte Suprema de Justicia.