Lleno de basura está Mariangola, corregimiento de Valledupar, debido a que hace más de un mes el camión de la empresa Aseo del Norte no recolecta la basura.
Esta situación ha causado preocupación y desespero de la comunidad, debido a que las basuras están tiradas en las calles o amontonadas en las viviendas.
Elibeth Zequeira, habitante del corregimiento, expresó a EL PILÓN que esto viene sucediendo hace más de un mes y que les ha tocado quemar las basuras, algo que contamina el medio ambiente.
“Me siento en la época de antes que se hacían montañas de basuras y nuestros abuelos y bisabuelos la quemaban porque no había otra cosa que hacer para que desapareciera”, expresó la mujer.
Además dijo que los habitantes de Mariangola han solicitado a la alcaldía que les solucione la problemática. “Se habló con Cristian Martelo, gerente de Aseo del Norte pero ha transcurrido más de un mes y no se ha visto ningún cambio”.
Zequeira expresó que en cada hogar se le da un manejo diferente a la basura, algunos tiran los desechos detrás del cementerio público y otros las arrojan a la carretera, causando malestar a los demás residentes.
“Hay mucha plaga en el corregimiento a raíz de las basuras, niños enfermos de la piel, esto es un peligro ambiental”, denunció Lucy Mirando, otra moradora de Mariangola.
“No quieren pagar”
EL PILÓN se comunicó con el gerente de Aseo del Norte, Cristian Martelo Quiroz, quien expresó que el camión recolector de basura no va a Mariangola porque simplemente sus habitantes no quieren pagar el servicio.
Según explicó el funcionario, hace cuatro meses atrás, la empresa responsable del servicio público domiciliario de aseo en la ciudad de Valledupar, se comprometió con la comunidad en hacer una limpieza en el corregimiento, “pero llegó el punto en que si no pagan se hace más difícil prestar el servicio porque hay que pagarle salario a los trabajadores, la gasolina y el peaje”, explicó Martelo Quiroz.
El gerente de Aseo del Norte expresó que la empresa tiene toda la voluntad de prestar el servicio, “pero es importante que ellos entiendan la responsabilidad que ellos tienen, que si no cancelan no hay forma de prestarlo; yo con ellos establecí una tarifa rural, que sería mucho más económico que el de Valledupar, pero ni así quieren pagar”.
Según el funcionario, ninguno de los corregimientos de Valledupar cancela la tarifa, sin embargo la empresa le presta el servicio a 12 de los 25 corregimientos de Valledupar.
Por Sara Maestre DiazGranados