Sandra Santiago B.
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Sea arhuaca, kankuama o wayúu, la mochila es el accesorio de moda en el Festival Vallenato, pues la usanza es llevar una mochila, sin importar qué etnia la elabore; aunque, cada una tiene una característica que la hace única y diferente.
Las preferidas por los turistas, tanto del interior del país, como del exterior son las arhuacas; porque, según dicen los visitantes, son más finas, más duraderas, no se estiran y son hechas con lana de ovejo de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Estas prendas se consiguen entre 120 mil y 250 mil pesos de acuerdo al tamaño y la calidad. A diferencia de las otras, la mochila arhuaca lleva una historia tejida: “los indígenas de la Sierra le tejen figuras que representan la naturaleza, la madre tierra, la hoja de coca, el pensamiento de la mujer, el camino del caballo, el rombo, cada una tiene un significado para ellos”, dijo Joaquín Hernández, un vendedor de artesanías, que ha aprendido mucho sobre ellas, porque es el negocio al que se dedica.
También está la mochila kankuama que, según dicen sus fabricantes, la han mejorado mucho, “ahora la hacen con un tejido más fino, la hacen con lana de ovejo y se caracteriza por ser de puntadas más gruesas que la arhuaca, cuyo tejido es más fino”.
La kankuama ha tenido mucha promoción en los últimos años y por eso también se volvió famosa; lo que ha hecho que su precio se haya ‘disparado’ y oscile entre los 120 mil a 140 mil pesos, de acuerdo al tamaño.
La mochila Kankuama es de color ocre o naranja muy claro, de saturación débil, que corresponde específicamente a la coloración de la lana cruda, mientras que la arhuaca viene en tonos café, negro u ocre.
Otra de las mochilas que no pueden faltar, sobre todo a una mujer en estas fiestas de acordeones es la wayúu. Se diferencia de las anteriores por ser de tonos alegres.
Amarillo, fucsia, rojo, anaranjado, verde, azul rey, son entre otros los colores con los que las indígenas de la alta Guajira las fabrican.
Utilizan nylon para realizarlas y, por ser una fibra sintética, es más económica que las dos anteriores, cuyos materiales son ciento por ciento naturales.
Las mochilas wayúu impregnan de colorido y por estos días además de venderse, adornan el parque de Las Madres, en donde las mujeres de esta etnia están expendiéndola.
Su valor oscila entre los 40 mil y 60 mil pesos. Cada año las mujeres indígenas innovan y traen este accesorio con un toque nuevo. Es así como este año vienen con asas largas o cortas, de acuerdo al gusto de la compradora.
Ingrid Espinosa, expendedora de este tipo de productos, asegura que la mochila wayúu es un accesorio exclusivo de las mujeres, “para el hombre están la arhuaca y la kankuama”.
Tanto Ingrid como Joaquín ya están preparados para la fiesta de acordeones, en el que saben que las mochilas ‘se venden como pan caliente’ y por eso doblaron sus pedidos, aunque dicen que no saben cuántas venden cada año para esta época; lo único de lo que están seguros es que las mochilas se imponen en Festival Vallenato y son las preferidas por todos para guardar el whisky, la cartera o simplemente para lucir bien durante el certamen.